Capítulo II.
E-inclusión y e-participación
6. Enfoque teórico y conceptual de la e-inclusión y la e-participación
Analizar y conocer realmente cuál es el estado real de la e-inclusión y la participación en las esferas social y pública a través de las TIC en Euskadi, (finalidad del presente informe extraordinario) requiere algunas consideraciones previas relacionadas con:
6.1. Enfoque conceptual: la e-inclusión y la e-participación
Ya en el año 2005, en la Comunicación de la Comisión al Consejo, al Parlamento Europeo y al Comité Económico y Social Europeo y al Comité de las Regiones “Trabajar juntos, trabajar mejor. Un nuevo marco para la coordinación abierta de las políticas de protección social y de inclusión en la Unión Europea” se plantea, en relación con la simplificación del MAC (método abierto de coordinación de la UE), los siguientes objetivos en el marco de sus acciones orientadas a “Contribuir decisivamente a la erradicación de la pobreza y la exclusión”6.
Estos objetivos siguen, 7 años después, vigentes y, de hecho, la estrategia de crecimiento europeo “Europa 2020” para la década actual, concreta la reducción de al menos en 20 millones el número de personas en situación o riesgo de pobreza y exclusión social (el objetivo de España se sitúa en el 1.400.000-1.500.000) como una de sus metas.
Dos de los riesgos a los que se enfrentan la UE y sus países miembros en relación con este objetivo son “promover la inclusión activa en la sociedad y el mercado laboral de los grupos más vulnerables” y “superar la discriminación y aumentar la integración de las personas con discapacidad, minorías étnicas, inmigrantes y otros grupos vulnerables”. Se trata de retos que abordan la inclusión (o la integración) de forma global, no obstante, se encuentran citados por su profunda relación con el objeto del presente informe, la inclusión y participación a través de las TIC en tanto en cuanto que las TIC pueden ser considerados como elementos de desigualdad o como contribuidores en el incremento de desigualdades existentes pero, sobre todo, por su potencial igualador, incluyente y facilitador de la participación en la vida social y pública de todos los individuos.
Por ello debemos tomar como referente la Agenda Digital Europea (ADE), es decir, la responsable de trasladar y contribuir a superar esos retos en la sociedad de la información y el conocimiento.
La ADE identifica determinados obstáculos que impiden el desarrollo de las acciones en materia de e-inclusión y que, socavan gravemente los esfuerzos realizados para explotar las TIC, entre ellos se encuentran:
Por ello, sitúa entre sus campos de acción tanto “Fomentar la alfabetización, la capacitación y la inclusión digitales” (pilar 6) en aras de evitar que los antecedentes o la capacitación no se constituyan como barreras para acceder al potencial de las TIC en relación con la autonomía y emancipación de las personas, como extender los “Beneficios que hacen posibles las TIC para la sociedad de la UE” (pilar 7) en relación con el envejecimiento de la población, la autonomía de los pacientes y la inclusión de las personas con discapacidad (entre otros aspectos).
Ambos orientados a la consecución de los objetivos generales de la política europea en materia de e-inclusión (inclusión digital) de reducir las brechas en el uso de las TIC y la promoción del uso de las TIC para superar la exclusión, y mejorar el desempeño económico, las oportunidades de empleo, la calidad de vida, la participación y la cohesión social7.
La Unión y los Estados miembros deberán adoptar todas las medidas que sean necesarias para lograr la inclusión de todos los ciudadanos, también los más desfavorecidos, en la sociedad digital, de conformidad con la Estrategia Europa 2020 y el artículo 9 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea8.
El término “e-inclusión” o “inclusión digital” hace referencia, en consecuencia, tanto a la no exclusión de las ventajas y beneficios que suponen las TIC (TIC inclusivas) de ningún individuo, como al hecho de que el uso de estas posibilita alcanzar objetivos más amplios de inclusión. e-inclusión pone el foco, entonces, en la participación de toda la población en todos los aspectos de la sociedad de la información.
De hecho, bajo el mencionado pilar 6 la Comisión Europea propone diferentes acciones orientadas a conseguir que los grupos potencialmente desfavorecidos adopten las tecnologías digitales, en referencia a las personas mayores, con menores niveles de alfabetización, con bajos ingresos o con discapacidad.
Grupos cuyas características no solo constituyen un elemento para su etiquetaje como “potencialmente desfavorecidos” de forma genérica sino que, además, suponen variables que afectan a sus posibilidades de e-inclusión. Ya en el último Europe’s Digital Competitiveness Report (2010)9 se proporcionan las claves de cuáles son las variables que pueden encontrarse en la trasfondo de una situación de exclusión digital: la pertenencia (o no) a un grupo desfavorecido (con especial incidencia en las personas mayores), el (bajo) nivel educativo, el (bajo) nivel de ingresos…
Se trata de variables que reducen, a la luz de los resultados del informe, las posibilidades de inclusión, por ello, el mismo informe indica como requisito previo para el logro de una sociedad e-inclusiva, la promoción de las competencias digitales (pilar 6 de la Agenda Digital Europea, eje 3 de la Estrategia 2011-2015 –Plan Avanza– en España y la iniciativa “Ciudadanía Activa” de la Agenda Digital de Euskadi –AD@1510–).
Si bien, poseer las habilidades, conocimientos y destrezas necesarios para hacer un uso eficaz de la TIC es un requisito fundamental para la inclusión digital de la ciudadanía, no lo son menos otros aspectos como la disposición de infraestructuras o la accesibilidad electrónica. Es decir, además de la cualificación y la competencia personal para utilizar las TIC, es necesario un adecuado despliegue de infraestructuras (incluido entre las prioridades de cualquiera de los marcos estratégicos11 que se aborden), el libre acceso a la información y la posibilidad de acceder a contenidos adaptados a las características diferenciales de las personas. Así, desde todos los niveles políticos se promueven y desarrollan acciones orientadas a incrementar las posibilidades de acceso de toda la población a la sociedad de la información.
Un ejemplo es el hecho de que varias son las disposiciones y recomendaciones de la Comisión Europea12 en relación con el planteamiento de un enfoque común materia de accesibilidad (electrónica o web) o de equidad en el acceso a infraestructuras, dispositivos, productos y servicios (desde la e-administración al e-business).
En particular, en relación con el cumplimiento de las pautas de accesibilidad web debe tenerse en cuenta que supone un gran número de ventajas tanto para el propio individuo que accede a los contenidos web como para las organizaciones (o empresas) que desarrollan sus espacios web de acuerdo a estos estándares (para más información véase la WAI del W3C13).
Así, entendemos en el presente informe extraordinario que la inclusión digital tiene valor por sí misma, por cuanto que posibilita que la población forme parte de la sociedad de la información, iguala a los individuos en sus condiciones de acceso y participación en la vida social y política a través de las tecnologías, es decir, se encuentra en la base de la aplicación de principios de justicia social y se constituye como garante de la equidad en la sociedad del conocimiento.
Precisamente porque la e-inclusión se constituye como un pre-requisito para la participación15 debemos explicitar cuál es el concepto de e-participación que se aborda en el presente informe.
Una gobernanza inclusiva sitúa su piedra angular en la promoción de la participación de los ciudadanos16. Se trata de facilitar que los ciudadanos tengan acceso a la información y a los servicios públicos pero, al mismo tiempo, que puedan participar en la toma de decisiones públicas que afecten tanto al bienestar de la sociedad en general como al del individuo de forma particular.
La e-participación comprende, entonces, tanto la acción gubernamental para potenciar y fomentar esa participación como la voluntad y la capacidad de la ciudadanía para hacerlo (su e-inclusión). Aunque no debe restringirse a los servicios G2C (Government to Citizen) si debe tener muy presente que la participación es un derecho de la ciudadanía.
En este sentido, baste una somera revisión de la normativa al respecto (véase capítulo “Marco normativo” de este mismo informe) para saber cómo se ha regulado este derecho de participación en los diferentes contextos políticos. La conclusión que se evidencia, de igual modo que en el artículo “Derecho a la Participación” del profesor Etxebarria (publicada en El Correo y en El Diario Vasco, 10 de diciembre de 2011) o en la Recomendación 12/2011 del Ararteko, es la falta de regulación sobre el derecho (y/o el deber) a participar en la vida pública más allá de las posibilidades de ser elegido como representante público o la de elegir a los representantes públicos.
No se entrará en este informe a dilucidar hasta qué punto la participación, de forma genérica (sin “e”), debe ser considerada un deber de la ciudadanía. Pero sí hemos de contemplar el deber de los gobiernos de facilitar que la totalidad de los individuos participen, si lo desean, que puedan ejercer ese derecho y no solo en aquellas partes de la vida pública que, en cada momento determinado, se establezcan desde el gobierno (volviendo al G2C) sino también en aquellas otras en las que, respondiendo, especialmente al interés común, la ciudadanía promueva la inclusión de iniciativas gubernamentales, inste a los gobiernos a plantearse actuaciones hasta el momento no abordadas, etc. (asumiendo un papel activo en modalidad C2G –Citizen to Government–).
Tradicionalmente, las iniciativas en e-participación han sido iniciadas por los gobiernos, pero en los últimos años la ciudadanía o los grupos organizados de ciudadanos (y ciudadanas) han lanzado un número creciente (de ellas).
Traducción propia a partir de Europe’s Digital Competitiveness Report (2010)18
De hecho, en el caso de Euskadi, ya se insta, en la mencionada recomendación del Ararteko, al Gobierno Vasco a “(…) proponer una ley que regule la participación ciudadana en los asuntos públicos dentro de nuestra Comunidad Autónoma. Esa norma deberá fijar un marco jurídico propio y regular el derecho de las personas de forma individual o a través de organizaciones, a participar conforme a los principios incluidos en esta recomendación”. Si bien se refiere a la participación de forma general, debemos hacerlo extensivo, por tanto, a la e-participación, es decir, al apoyo de las TIC a la participación en los procesos involucrados en el gobierno y la gobernanza19.
Teniendo en cuenta que las iniciativas en materia de e-participación iniciadas de arriba abajo por los gobiernos han tenido (en 2010) menos éxito que las iniciadas por la ciudadanía o las organizaciones sociales20 el Plan de Acción Europeo sobre Administración Electrónica 2011-201521, en consonancia con la Declaración Ministerial de Malmö, señala como una de sus prioridades la “Capacitación del usuario” es decir, incrementar la capacidad de ciudadanos, empresas y otras organizaciones para comportarse proactivamente en la sociedad a través del uso de nuevas herramientas tecnológicas. Pueden acrecentarse la eficiencia de los servicios públicos y la satisfacción de los usuarios si se responde mejor a las expectativas de estos y si se diseñan aquellos en torno a las necesidades de los usuarios y en colaboración con ellos siempre que sea posible. Se trata asimismo de que las administraciones públicas ofrezcan un acceso sencillo a la información pública, mejoren la transparencia y permitan la participación efectiva de ciudadanos y empresas en el proceso de formulación de políticas22.
Por su parte, el Gobierno de España señala23 la necesidad de establecer una estrategia de Administración electrónica de España para el año 2015, en cumplimiento de los compromisos derivados del Plan de Acción 2011-2015 de Administración Electrónica de la Unión Europea. Las prioridades de esta estrategia se centran en una Administración pública sostenible, una sociedad productiva y cohesionada y una sociedad participativa y colaborativa.
De hecho, ya en la Estrategia 2011-2015 del Plan Avanza2 (publicada en 2010) se señala “Desarrollar servicios de Gobierno Abierto y de la eAdministración” como uno de los retos (eje 4 “contenidos y servicios digitales”) entendiendo el gobierno abierto como una nueva estrategia de interacción entre la Administración Pública y sus administrados, caracterizada por el establecimiento de canales de comunicación y contacto directo entre ellos. Es decir, posibilitar la comunicación constante y directa entre gobierno y ciudadanía o, lo que es lo mismo para poder tomar decisiones basadas en sus necesidades y preferencias es necesario impulsar la participación de la población, lo que supone cambios culturales pero también cambios en los canales de comunicación, pasando a ser electrónicos. En definitiva, iniciando el camino de la e-participación.
6 COM/2005/0706 final. Las negritas son propias.
7 Política de la Comisión Europea en materia de e-inclusión en alineamiento con el reconocimiento (número 4) de la Declaración Ministerial de Riga.
8 Dictamen del Comité Económico y Social Europeo sobre la «Comunicación de la Comisión al Parlamento Europeo, al Consejo, al Comité Económico y Social Europeo y al Comité de las Regiones: Plan de Acción Europeo sobre Administración Electrónica 2011-2015 – Aprovechamiento de las TIC para promover una administración pública inteligente, sostenible e innovadora» COM(2010) 743 final y la «Comunicación de la Comisión al Parlamento Europeo, al Consejo, al Comité Económico y Social Europeo y al Comité de las Regiones – Hacia la interoperabilidad de los servicios públicos europeos» COM(2010) 744 final.
9 Capítulo 4 “eInclusion: regular internet use and skills among groups at risk of exclusion“, European Union, 2010.
10 Para un mayor detalle sobre estos planes, véase el capítulo “Marco estratégico y normativo” de este mismo Informe.
11 Pilar 4 “Very Fast Internet” de la ADE; eje 1 “Infraestructuras” del Plan Avanza2 y la iniciativa “Infoestructuras” de la AD@15.
12 Ejemplo:
13 Web Accessibility Initiative (WAI), especialmente la sección destinada al diseño inclusivo.
14 Wikipedia: inclusión digital.
15 En el documento MEMO/06/237 Information and communication technology for an inclusive society – Frequently asked questions se cita, literalmente, Easy access to (ICT) is a prerequisite for participation.
16 United Nations e-Government Development Database. UN Public Administration Programme. e-Participation http://www2.unpan.org/egovkb/egovernment_overview/eparticipation.htm#.
17 Si en sus orígenes el ámbito de expresión del derecho a la participación se ciñó a la vida política en su sentido más preciso (estructuras del Estado y partidos políticos), hoy somos conscientes de que en la sociedad civil a través de sus organizaciones, e incluso espontáneamente en momentos sociales cargados de intensidad, se pueden tener también firmes participaciones públicas, valiosas cuando se sitúan en ese horizonte del bien público. Etxebarría, X. “Derecho a la participación” en El Correo y en El Diario Vasco, 10 de diciembre de 2011.
18 Capítulo 5. “Online Public Services”. Apartado 1.5. e-Government. e-Participation, European Union, 2010.
19 Wikipedia: ICT supported participation in processes involved in government and governance, cit. en Europe’s Digital Competitiveness Report (2010).
20 Europe’s Digital Competitiveness Report, European Union, 2010.
21 COM (2010) 743. Aprovechamiento de las TIC para promover una administración pública inteligente, sostenible e innovadora.
22 Las negritas son propias.
23 Resumen ejecutivo del informe presentado al Consejo de Ministros de 16 de septiembre de 2011 sobre la situación de la Administración electrónica en la Administración General del Estado. Esta estrategia fue presentada durante la sesión 1 “e-Government and the Administration” en el encuentro “Going Local II” celebrado en Sevilla, en diciembre de 2011.
24 Ibídem.
6.2. Enfoque teórico: el continuo en el empoderamiento digital
El enfoque bajo el que se realiza este informe extraordinario sobre E-inclusión y participación en las esferas social y pública a través de las TIC en Euskadi parte de un modelo teórico de “empoderamiento digital” (de adopción de las TIC) que posiciona a la totalidad de la población en un continuo que aborda cuatro posibles estadios en relación con la preparación técnica y la apropiación de las tecnologías que realiza la ciudadanía de Euskadi.
Así, en este modelo teórico queda reflejada la totalidad de la población desde aquella excluida de la sociedad de la información (no e-incluida) hasta quien utiliza las TIC como instrumento para participar, de forma plena, en la vida social y política (e-participación). Para ello se establece una escala con 4 estadios diferenciados que, de forma esquemática, agrupan a quienes:
(Ilustración 14)
Continuo de evolución de empoderamiento digital
A. Estadio 0- Infoexclusión: No utilizan herramientas tecnológicas o lo hacen en escalas mínimas. Se encuentran en una situación de infoexclusión (o e-exclusión). Se trata de personas que carecen de acceso a infraestructuras tecnológicas o de conocimientos para su utilización o que las perciben como algo ajenos sin posibilidad de realizar ningún aporte a sus intereses personales.
B. Estadio 1- E-inclusión incipiente: Realizan usos estándar de las tecnologías (se comunican, acceden a información a través de la web…). Son perfiles de uso correspondientes a la web 1.0, de consumidores. Conciben las tecnologías como instrumentos específicos para aspectos concretos de su vida profesional o personal.
C. Estadio 2- E-inclusión: Realizan uso más avanzado de la tecnología digital, apropiándose de las TIC participando de forma más activa en la construcción de la SI. Usan las TIC, obteniendo un alto beneficio de ellas, aprovechando gran parte de su potencial, son prosumidores, es decir, realizan aportaciones a la sociedad de la información en forma de contenidos propios construyendo y colaborando, para lo cual es primordial conseguir que vayan avanzando en el uso de las TIC y conectando con sus necesidades. Tienen conciencia del potencial de las TIC como elemento que mejora sus condiciones vitales y de que, además, contribuyen a su empoderamiento social.
D. Estadio 3- E-participación: Aprovechan la apropiación de las TIC que han realizado, ejercen su empoderamiento para tomar parte activa, a través de herramientas tecnológicas, en la vida social y política. En definitiva, ejercen su derecho a participar en la vida pública, en la toma de decisiones sobre su municipio, región… siendo proactivas, iniciando procesos (de abajo arriba), participando en procesos iniciados (de arriba abajo), etc.
Debe tenerse en cuenta que el establecimiento de un estadio 0 responde a la consideración de una evolución en el aprovechamiento de las tecnologías tanto en la esfera privada como en la pública y, por tanto, su inexistencia provoca la necesidad de establecer un estadio previo (0) que refleje estas circunstancias.
En la transición entre los diferentes estadios existen condicionantes que determinan la posición de la ciudadanía en uno otro así como en su ubicación en una (o varias) situaciones de “brecha” (que explicitaremos a continuación). Algunas de estas variables se han señalado anteriormente: la edad, el nivel educativo, la situación profesional (especialmente en cuanto a los ingresos), la diversidad funcional o, incluso, el género. Corresponde al análisis posterior que se incluye en este mismo informe señalar, concretamente, cuáles son así como cuál es la situación de la población vasca en relación a cada una de ellas. En el siguiente gráfico se muestra cómo pueden afectar algunas de ellas:
(Ilustración 15)
Variables que condicionan el posicionamiento en estadios
Como puede observarse en las ilustraciones anteriores, existe cierta superposición entre los estadios debida a la amplitud de los estadios en función de qué variables se tengan en cuenta durante la aplicación del modelo teórico. Así podrán establecerse diferencias, dentro de un mismo estadio, en función de dichas variables (edad, nivel educativo…) pero también en relación con la frecuencia, calidad y tipo de usos; las diferentes habilidades digitales (e-skills) que se requieren; el número y tipología de productos o servicios utilizados; el objetivo perseguido o, incluso, la percepción de la propia situación con respecto a las TIC.
El posicionamiento en uno u otro estadio supone coloca a la población en una situación de “brecha digital”, es decir, de desigualdad entre los miembros de una misma población. Se hace necesario, entonces, establecer diferentes tipos (o niveles) de brecha25 acordes con la evolución descrita. Cada una de las brechas que se relacionan a continuación incluye, evidentemente, las de “nivel superior”:
(Ilustración 16)
Brechas y niveles de empoderamiento digital
En cualquier caso, la evolución del empoderamiento digital es, y como tal debe ser utilizado, un aliado para la justicia social, es decir, un apoyo en los procesos más amplios de inclusión y promoción social. Debe ponerse especial énfasis en aquellos colectivos que están en situación de riesgo social o de exclusión social prescindiendo de modelos más centrados en lo tecnológico que se basan en datos cuantitativos relacionados con el número de personas que se encuentran en un determinado tipo de uso (en cuanto a cantidad y diversidad de aplicaciones utilizadas o la frecuencia de uso) yendo hacia el despliegue de modelos que pongan el foco en la mejora de las condiciones y la calidad de vida de las personas, especialmente cuando estas se encuentran en riesgo de exclusión por cualquier motivo.
Se trata, entonces, de avanzar, de sentar las bases para la puesta en marcha de acciones que tomen como punto de partida las necesidades e intereses de la ciudadanía, en las que las personas están implicadas desde el propio diseño, participando en todo el proceso para desarrollar alternativas innovadoras con alto potencial de impacto real en los diferentes espectros de la vida cotidiana: el empleo, la salud, los servicios sociales… Se trata de lograr un modelo de sociedad inclusiva y, por tanto, e-inclusiva en igualdad de condiciones para toda la población, en la que toda la ciudadanía esté capacitada y empoderada para tomar sus propias decisiones en cuanto a cómo aprovecha esas ventajas, en relación con cuál es su participación (activa, pasiva o “en ocasiones una y en ocasiones otra”) en la sociedad a la que pertenecen, es decir, en la sociedad de la información y el conocimiento actuales en la que las TIC son un elemento inherente.
7. Marco estratégico
Situar el marco estratégico del informe extraordinario sobre E-inclusión y participación ciudadana en las esferas social y pública a través de las TIC en Euskadi supone la revisión de los principales desarrollos realizados a nivel mundial, europeo, nacional y autonómico (sin olvidar las referencias locales) así como las directrices que emanan de las políticas ejecutadas en estos ámbitos en relación con la e-inclusión y la e-participación.
En este capítulo se refleja el tratamiento que reciben ambos en los principales documentos, considerados referentes estratégicos en materia de sociedad de la información en los distintos contextos (mundial, europeo, nacional y autonómico).
7.1. Marco estratégico internacional
En el ámbito internacional se han analizado, de acuerdo a los objetivos del presente informe, las directrices, recomendaciones y compromisos adquiridos mediante la firma de la “Declaración Ministerial de Riga” y la “Cumbre Mundial de la Sociedad de la Información”, aún vigentes.
Debe señalarse que ambos documentos son coetáneos (2005-2006) y, aunque sus objetivos deberían haber sido ya cumplidos, en la actualidad, a principios de 2012, no se han logrado en su totalidad y, por ello, deben aún ser tenidos en cuenta en la formulación de cualquier acción gubernamental en materia de sociedad de la información por los países firmantes.
Ambos documentos abordan aspectos de especial relevancia para este informe, los compromisos relacionados con el logro de una sociedad de la información inclusiva.
En relación con la e-participación, la referencia expuesta en este informe es la “Declaración Ministerial sobre E-government” acordada en el marco de la 5ª Conferencia Ministerial sobre e-government desarrollada en Malmö (Suecia) en 2009.
7.1.1. Cumbre Mundial de la Sociedad de la Información (CMSI)
Uno de los resultados de los trabajos de la segunda fase de la CMSI (Túnez, 2005) se obtiene el documento Compromiso de Túnez26 que refleja los compromisos adoptados para construir una Sociedad de la Información centrada en la persona, abierta a todos y orientada al desarrollo.
En relación con el objeto del presente informe, merecen especial mención la adopción de compromisos relacionados con garantizar la inclusión de toda la población en la SI, es decir, con lograr que toda la población se beneficie de las oportunidades que puedan brindar las TIC (párrafo 9), con eliminar las barreras que impidan el acceso universal, ubicuo, equitativo y asequible a la información (párrafos 10 y 18).
Pero, sin duda, es necesario destacar el papel que se otorga a las TIC en relación con la justicia social, en cuanto que pueden en impedir el aumento (párrafo 13) de las divisiones sociales y económicas y de las disparidades entre los países, las regiones y los individuos ricos, y los países, regiones e individuos pobres – incluidas las existentes entre hombres y mujeres; o en relación con la especial atención a los discapacitados (…) a fin de crear oportunidades digitales para todos (…) (párrafo 18); a las necesidades particulares de los grupos marginados y vulnerables de la sociedad, (…) (párrafo 20); o el importante papel de la plena participación de las mujeres en la Sociedad de la Información (…) para garantizar la integración y el respeto de los derechos humanos dentro de la misma (párrafo 23).
En relación con la participación (aunque no existe referencia expresa a la participación de la población en la esfera pública) debe destacarse el párrafo 37 que expresa la necesidad de participar a todos los niveles para lograr que la SI beneficie a toda la población.
Además, debe señalarse cómo se destacan las posibilidades que las TIC ofrecen para la participación de la población en la ampliación y el intercambio de las bases del conocimiento humano (…) bases para la creación de una Sociedad de la Información totalmente integradora y orientada al desarrollo y de una economía del conocimiento que respete la diversidad cultural y lingüística (párrafo 11); o su concepción como instrumento eficaz (…) para propiciar la democracia, la cohesión social, la buena gobernanza y el estado de derecho, en los planos regional, nacional e internacional (párrafo 15).
7.1.2. Declaración Ministerial de Riga (2006)
La firma de la Declaración Ministerial de Riga por parte de 34 países europeos expresa el firme compromiso de promover una sociedad de la información inclusiva y sin barreras para toda la población no solo desde la perspectiva del acceso y uso de las tecnologías sino como instrumento que fomente la inclusión social y económica.
Con dicha firma se formaliza el acuerdo de prestar atención a las siguientes prioridades:
7.1.3. Declaración Ministerial sobre E-government (MALMÖ 2009)
La Declaración Ministerial sobre E-government firmada en Malmö en noviembre de 2009, recoge la visión, las prioridades políticas y los objetivos compartidos por 34 países en el continente europeo.
En ella se reconoce la expectativa de la ciudadanía europea y las empresas de que sus gobiernos sean más abiertos, flexibles y colaborativos en la prestación de servicios públicos en toda Europa. Por ello fija las prioridades para 2015 en relación con el desarrollo de servicios, herramientas y disposición de las condiciones técnicas y legales que posibiliten el empoderamiento de la ciudadanía y las empresas a través de servicios de e-government diseñados a partir de las necesidades de los usuarios, el mayor acceso a la información pública o el fortalecimiento de la transparencia; la movilidad en el mercado único de profesionales, estudiantes… en cualquier parte de la UE; el incremento de la eficacia y la eficiencia gracias al uso de la Administración electrónica, la mejora de los procesos organizacionales y la promoción de una economía sostenible.
Entre sus objetivos y las recomendaciones a las administraciones públicas, esta declaración insta, no solo a la necesaria colaboración interadministrativa y con terceras partes, sino también a la aplicación de principios de transparencia en los procesos administrativos, así como a incrementar la capacidad de reutilización de la Información del sector público o a la consideración de la innovación como parte integral del modo de trabajar en los servicios de e-government. Además del uso de especificaciones abiertas para el desarrollo servicios, basados en las necesidades reales de la ciudadanía, siempre desde la perspectiva de la sostenibilidad medioambiental.
26 Tunnis Commitment. Documento WSIS-05/TUNIS/DOC/7-E de 18 de noviembre de 2005. Traducción al español http://www.itu.int/wsis/docs2/tunis/off/7-es.html
27 Address the needs of older workers and elderly people.
28 Reduce geographical digital divides by (…).
29 Enhance eAccessibility and usability by (…).
30 Improve digital literacy and competences.
31 Promote cultural diversity in relation to inclusion by (…).
32 Promote inclusive e-government by (…).
33 Mobilise appropriate instruments by (…).
34 Internet for all: EU ministers commit to an inclusive and barrier-free information society, Press Release IP/06/769.
7.2. Marco estratégico de la Unión Europea
En el contexto de la Unión Europea se aborda, en relación con el objeto del presente informe, las prioridades, objetivos, retos y líneas de acción emanan de los principales documentos europeos en materia de sociedad de la información.
Así, se expone a continuación los resultados del análisis de la “Agenda Digital para Europa”, el Programa ICT – PSP (ICT Policy Support Programme), el ejercicio “DAE Going Local” que abordan, en lo que a este informe se refiere y de forma principal, cuestiones que afectarán al nivel de e-inclusión de la ciudadanía europea (además de las empresas, las administraciones públicas y la sociedad civil).
En relación con la e-participación, la referencia analizada es el “E-government Action Plan 2011-2015” que se asienta sobre la base de la “Declaración Ministerial sobre E-government (Malmö 2009)” analizada anteriormente.
7.2.1. Agenda Digital para Europa (ADE)
La estrategia europea en materia de sociedad de la información denominada “Agenda Digital para Europa” (ADE) es una de las 7 iniciativas emblemáticas de la estrategia de crecimiento europeo “Europa 2020” para la década actual. Esta, al igual que el resto de las iniciativas, es considerada motor del crecimiento y el empleo en Europa.
Esta agenda se ha elaborado a partir de amplias consultas públicas y de las aportaciones de diversos informes35, proponiendo los objetivos y las acciones clave para todo el contexto de la Unión Europea, tomando el relevo a la iniciativa i2010 (y a las que antecedieron a esta: eEurope2005, eEurope2002 y eEurope) de la que es su sucesora, así como las medidas que urge adoptar para que Europa pueda crecer de forma inteligente, sostenible e incluyente.
El propósito de la ADE es definir la función capacitadora esencial que deberá desempeñar el uso de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) si Europa quiere hacer realidad sus ambiciones para 202036.
Se trata de propuestas que establecen el marco (y la base) para el logro de transformaciones hacia una sociedad y una economía crecientemente digitales. Para ello se identifican, en primer lugar, los 7 obstáculos más importantes, entre los que se incluyen las carencias en la alfabetización y la capacitación digitales o la pérdida de oportunidades para afrontar los retos sociales, además de otros impedimentos relacionados con la falta de infraestructuras, la interoperabilidad entre ellas o la desconfianza e inseguridad en las redes.
En base a estos aspectos problemáticos se estructuran las acciones clave de la ADE repercutiendo sobre las tres dimensiones de crecimiento de “Europa 2020” (inteligente37, sostenible e integrador). Estos aspectos problemáticos sobre los que se organizan las acciones clave son, según el propio texto de la Comunicación (COM (2010) 245 final/2):
(Tabla 5)
Acciones clave de la ADE: problemática y justificación
Problemáticas | Justificación |
---|---|
Un mercado único digital dinámico | Ya es hora de que un nuevo mercado único permita acceder a las ventajas de la era digital |
Interoperabilidad y normas | Para construir una verdadera sociedad digital, es necesaria una interoperabilidad efectiva entre los productos y servicios de TIC |
Confianza y seguridad | Los europeos no adoptarán una tecnología en la que no confíen; la era digital no es ni el «gran hermano» ni el «salvaje oeste cibernético» |
Acceso rápido y ultrarrápido a Internet | Necesitamos un Internet muy rápido para que la economía crezca vigorosamente y genere puestos de trabajo y prosperidad, así como para garantizar que los ciudadanos puedan acceder a los contenidos y servicios que desean |
Investigación e innovación | Europa debe invertir más en I+D y garantizar que nuestras mejores ideas lleguen al mercado |
Fomentar la alfabetización, la capacitación y la inclusión digitales | La era digital debe significar autonomía y emancipación; los antecedentes o la capacitación no deben constituirse en barreras para acceder a este potencial |
Beneficios que hacen posibles las TIC para la sociedad de la UE | Un uso inteligente de la tecnología y la explotación de la información nos ayudará a afrontar los retos que tiene planteados la sociedad, tales como el cambio climático y el envejecimiento de la población |
En relación con la e-inclusión, la “Agenda Digital para Europa” propone la puesta en marcha de acciones en relación con el fomento de la alfabetización, la capacitación y la inclusión digitales que permitan a la población, no solo mejorar su empleabilidad, sino también, aprender, crear, participar y abordar con confianza y discernimiento el uso de los medios de comunicación digitales y el desarrollo de servicios digitales incluyentes, accesibles y usables, que posibiliten a la totalidad de la población (independientemente de sus características diferenciales) su acceso y disfrute. Se trata, en definitiva de reducir la brecha digital ayudando a que los miembros de los grupos sociales desfavorecidos a participar más en pie de igualdad en la sociedad digital (incluidos los servicios de interés directo para ellos, por ejemplo en los ámbitos del aprendizaje, la Administración pública o la salud en línea) y a salir de su condición desfavorecida incrementando su empleabilidad.
Algunas de estas acciones clave son:
Instando a los Estados miembros a:
Con el fin de, gracias a la acción conjunta, lograr, en el ámbito de la inclusión digital los siguientes objetivos:
Ahora bien, la e-participación no posee mención explícita en la Agencia Digital para Europa en relación con la esfera pública, a pesar de que la misma ha sido sometida a un proceso de consulta pública (y se sigue sometiendo), así como las conclusiones del informe sobre la competitividad digital de Europa - Principales logros de la estrategia i2010 entre 2005 y 2009. Este informe señala, entre los retos que aún deben acometerse, y que se sitúan en la base de la ADE:
Europa necesita una nueva agenda digital para hacer frente a los retos que van surgiendo, crear una infraestructura de primera categoría y explotar plenamente el potencial de Internet como motor del crecimiento y como base para la innovación abierta, la creatividad y la participación.
La acción preparatoria para la participación electrónica (e-participación) muestra de qué forma el uso de las nuevas tecnologías puede conducir a una mayor participación pública, proporcionando a los ciudadanos nuevas herramientas que les permiten hacer oír su voz41.
7.2.2. ICT Policy Support Programme (ICT PSP)
Consideramos conveniente, en el contexto de la Unión Europea, incluir aquí el ICT Policy Support Programme (ICT PSP), uno de los tres programas específicos del CIP (Competitiveness and Innovation framework Programme) para los años 2007-2013. Cuyo objetivo es estimular el crecimiento inteligente, sostenible e incluyente acelerando la apropiación más amplia y el mejor uso de innovadoras tecnologías y contenidos digitales por los ciudadanos, gobiernos y empresas.
Este programa, que presta apoyo en la realización de la ADE, pone el énfasis en las áreas de interés público, en relación con las aportaciones que las TIC pueden realizar a los desafíos sociales de la Europa actual (salud, envejecimiento, inclusión, eficiencia energética, movilidad sostenible, preservación de la cultura, aprendizaje y la mejora de la eficiencia de las administraciones públicas).
Si bien, el ICT PSP se orienta, principalmente a los desarrollos de empresas, administraciones públicas y otros agentes económicos y sociales, se incluye en este informe por el valor que los modelos, aplicaciones y servicios desarrollados suponen, una vez distribuidos, en el uso, la apropiación y la participación de la ciudadanía.
Actualmente, el borrador del Programa de Trabajo para 2012 (WP2012) pone el foco de la convocatoria de propuestas piloto en 5 temas (alineados con las acciones clave incluidas en la ADE). A continuación, se refleja, para cada uno de ellos, los aspectos relacionados con el objeto del presente informe (e-inclusión y e-participación):
7.2.3. E-government Action Plan 2011-2015
Sobre la base de la Declaración Ministerial sobre E-government de Malmö se establece el Plan de Acción de E-government de la UE para el periodo 2011-2015, que apoya y complementa a la ADE contribuyendo a la generación de la economía sostenible e incluyente basada en el conocimiento.
Las prioridades del plan se sitúan en:
Se trata, sin duda, de acciones cuyos resultados (herramientas y servicios) sientan las bases para aumentar las posibilidades de e-inclusión de la población pero, sobre todo, de e-participación en la esfera pública. Evidentemente se requiere, además, que se haya difundido su existencia y operativa y, esencialmente, se haya alcanzado un aceptable grado de confianza por parte de la población en su uso que, por otro lado, requerirán de capacitación para realizar un uso efectivo (y eficaz) de estas herramientas y servicios.
7.2.4. “Agenda Digital para Europa: Acción Local”-DAE Going Local Exercise
El llamado “DAE Going Local Exercise” es la iniciativa que traslada la ADE a los diferentes países miembros de la Unión Europea. Se trata de un importante ejercicio de participación ciudadana, que ponen en marcha mecanismos para asesorar y realizar el seguimiento sobre la planificación e implementación de la ADE en los diferentes territorios.
Se concreta en visitas a los Estados miembros y en el establecimiento de debates (con un uso ambicioso de los medios sociales) para construir y mantener una comunidad online. Durante el año 2010 las visitas aumentaron la concientización sobre la Agenda Digital, en 2011 se centraron en recopilar información sobre la implementación de la Agenda en cada país.
Si bien no está disponible el informe de evaluación del ejercicio 2011, sí consideramos necesario tener en cuenta algunas conclusiones del correspondiente informe de 201042. El ejercicio ha sido bien recibido con una alta participación pero se requiere un compromiso activo en la aplicación constante de la DAE a nivel de los Estados miembros más allá de la “voluntad compartida” y la “visión común”. Por otro lado, los agentes locales requieren un seguimiento y supervisión continua por parte de la DAE y demandan que, en sucesivas ocasiones, no se abordara la totalidad de la Agenda sino que se centrara en cuestiones específicas con objetivos y acciones bien definidas.
Tanto es así que, en el caso de España y en 2011, fue organizado en torno al análisis sobre cuál es la situación actual del país en relación con contenidos digitales, e-gobierno, innovación social y espectro y el debate sobre las acciones necesarias y las iniciativas desarrolladas, en esos ámbitos, a nivel local y nacional.
7.2.5. Internet Governance (Council of Europe Strategy 2012-2015)
Presentada por el Consejo de Europa el 15 de marzo de 2012, la estrategia Internet Governance se centra en la protección y el respeto de los derechos de las personas usuarias, el Estado de derecho y la democracia en la red.
La estrategia fue aprobada por el Comité de Ministros, en alineación con el Committee of Ministers 2011 Declaration on Internet Governance Principles y sus recomendaciones, e impulsa que todas las partes implicadas unan sus esfuerzos para hacer de Internet un espacio abierto y centrado en la ciudadanía.
A través de sus 40 líneas de actuación, enfatiza en algunas prioridades como:
35 La agenda digital se basa en amplias consultas, y en particular en las aportaciones del Informe sobre Competitividad Digital 2009 (COM 2009)390, en la consulta pública efectuada por la comisión en 2009 sobre las futuras prioridades en TIC, en las conclusiones del Consejo TTE de diciembre de 2009, la consulta y la estrategia Europa 2020, y en la ICT Industry Partnership Contribution to the Spanish Presidency Digital Europe Strategy, en el Informe por propia iniciativa del Parlamento Europeo sobre 2015.eu y de la declaración acordada en la reunión ministerial informal celebrada en Granada en abril de 2010.
36 COMUNICACIÓN DE LA COMISIÓN AL PARLAMENTO EUROPEO, AL CONSEJO, AL COMITÉ ECONÓMICO Y SOCIAL EUROPEO Y AL COMITÉ DE LAS REGIONES “Una Agenda Digital para Europa” (COM(2010) 245 final/2).
37 No obstante, debe señalarse que la información sobre la ADE se ubica (en el portal web de la estrategia “Europa 2020”) en la prioridad “crecimiento inteligente” que, entre otros ámbitos, se ocupa de la sociedad digital (utilizar las tecnologías de la información y la comunicación).
38 Acción clave 10 según la redacción de la COM (2010) 245 Final/2
39 Acción clave 11 según la redacción de la COM (2010) 245 Final/2.
40 Otras acciones según la redacción de la COM (2010) 245 Final/2.
41 COM (2009) 360 Final Informe sobre la competitividad digital de Europa. Principales logros de la estrategia i2010 entre 2005 y 2009. En relación con el objetivo “Una sociedad de la información que sea integradora, ofrezca servicios públicos de gran calidad y promueva la calidad de vida” (pilar: “Velar por que todos los ciudadanos se beneficien de las TIC”).
42 Report on the assessment of the Digital Agenda for Europe (DAE) Going Local Exercise. Final Report, December 2010.
7.3. Marco estratégico nacional
7.3.1. Agenda Digital para España
El Gobierno de España ha decidido desarrollar una Agenda Digital para España (ADE) como marco de referencia para establecer la hoja de ruta en materia TIC y de Administración electrónica. Asimismo, este documento, aprobado por el Consejo de Ministros de 15 de febrero de 2013, pretende:
Para ello, la Agenda Digital para España se estructura en torno a 6 grandes objetivos o líneas de trabajo:
La Agenda Digital para España se ha construido a partir de un sistema de participación que, a diferencia de los utilizados en otras ocasiones (como por ejemplo borrador de la Ley de Transparencia del Gobierno de España) permite a la ciudadanía comentar las medidas del documento borrador, y poder ver las respuestas a dichos comentarios, así como los comentarios de otras personas usuarias.
Entre las medidas propuestas en dicho documento de la ADE que resultan de especial interés para los focos abordados en el presente informe extraordinario, destacan:
7.3.2. Plan Avanza2 (Estrategia 2011-2015)
La Estrategia 2011-2015 del Plan Avanza2, se aprueba una vez se ha alcanzado buena parte de los objetivos planteados por su antecedente, el Plan Avanza (2006-2010)43 con la intención de cubrir la necesidad de seguir avanzando hacia una sociedad del conocimiento. Esta segunda etapa, de continuidad, mantiene las actuaciones en ejecución y actualiza los objetivos del plan anterior para adecuarlos a los retos actuales de la sociedad.
Si en la primera fase se perseguía recuperar el retraso de España respecto de la Unión Europea, especialmente en cobertura y conectividad, la fase 2 pretende situar a España en una posición de liderazgo en el desarrollo y uso de productos y servicios TIC avanzados, incluyendo, además, un punto de vista social, ya que fomentar la Sociedad de la Información es, también, apostar porque todas las personas se beneficien de los avances tecnológicos con independencia de cuál sea su edad, género, residencia o capacidad física, psíquica o económica. Por ello, se ha modificado la estructura del plan (en la fase 1) pasando de 4 áreas de actuación generalistas: ciudadanía digital, economía digital, servicios públicos digitales y nuevo contexto digital, a través de cinco ejes de actuación más concretos: infraestructuras, confianza y seguridad, capacitación tecnológica, contenidos y servicios digitales y desarrollo del sector TIC, que reflejan la nueva orientación de la actuación gubernamental enmarcada dentro de las iniciativas europeas (Agenda Digital Europea).
Para ello, se plantean más de 180 medidas que, organizadas a partir de 34 retos identificados en los diferentes ejes, y sumados a la propuesta de cambios normativos pretenden alcanzar los siguientes objetivos:
O.1. Promover procesos innovadores TIC en las AA.PP.
O.2. Extender las TIC en la sanidad y el bienestar social.
O.3. Potenciar la aplicación de las TIC al sistema educativo y formativo.
O.4. Mejorar la capacidad y la extensión de las redes de telecomunicaciones.
O.5. Extender la cultura de la seguridad entre la ciudadanía y las empresas.
O.6. Incrementar el uso avanzado de servicios digitales por la ciudadanía.
O.7. Extender el uso de soluciones TIC de negocio en la empresa.
O.8. Desarrollar las capacidades tecnológicas del sector TIC.
O.9. Fortalecer el sector de contenidos digitales.
O.10. Desarrollar las TIC verdes.
La revisión de las medidas propuestas desde la óptica de la relevancia en relación con la e-inclusión y la e-participación, hace necesario señalar que este cambio de modelo refleja la intención de conseguir que la totalidad de la población (con especial énfasis en la incorporación de las personas con discapacidad y de mayor edad –además de las PYMES–) se beneficie de las ventajas de la sociedad de la información.
De hecho, la disponibilidad, y extensión a toda la ciudadanía, de infraestructuras de telecomunicaciones adecuadas (eje 1 “Infraestructuras”), permite luchar contra la brecha digital y de género (y contra cualquier otra derivada de la pertenencia a un colectivo en riesgo de infoexclusión), ofrecer servicios electrónicos avanzados a la ciudadanía (…).
Del mismo modo, fomentar la confianza en las TIC entre la ciudadanía y concienciar sobre la utilidad y seguridad (eje 2 “confianza y seguridad”), facilitando una mayor confianza de los usuarios hacia ese canal de distribución de información, productos y servicios de todo tipo, contribuirá a una mayor apropiación de las tecnologías y los servicios puestos a disposición de la ciudadanía.
Por otro lado, es evidente, el rol que las medidas incluidas en el eje 3 “capacitación tecnológica” desempeña en las posibilidades de e-inclusión y e-participación de la ciudadanía. La capacitación es uno de los pilares de la sociedad de la información, sin conocimientos, sin habilidades, sin competencia digital, la población no podrá ser partícipe de las herramientas que se ponen a su disposición. Por ello, el Plan Avanza2 ha dedicado (y sigue dedicando) una buena parte de su presupuesto al desarrollo de acciones que formen a la población en el uso y la aceptación de las TIC, así como en la utilización de los servicios digitales, especialmente por aquella parte de la ciudadanía en riesgo de exclusión digital, fomentándose, además, la igualdad de género en la red (contribuyendo así a la reducción de la brecha digital de género).
En cuanto al eje 4 “contenidos y servicios digitales” debe señalarse la importancia de que desde este plan se impulse la industria de los contenidos digitales realizando esfuerzos por asegurar la accesibilidad de los contenidos desarrollados; se apoye a las EELL en la plena adaptación a la Ley de Acceso garantizando la no exclusión de aquellos ciudadanos pertenecientes a colectivos en riesgo de exclusión y la atención a las demandas de mejores servicios, mayor seguridad y participación de la población; se proponga la necesidad de que los nuevos servicios (en educación, en salud…) cumplan criterios de accesibilidad e interoperabilidad; además de impulsar la transformación de la Administración pública, evolucionando hacia un modelo de gobierno abierto, lo que supone, sin duda, un importante cambio cultural, que implica la puesta en marcha de una nueva estrategia de interacción entre la Administración pública y sus administrados, caracterizada por el establecimiento de canales de comunicación y contacto directo entre ellos.
Por último, desde el eje 5 “desarrollo industrial del sector TIC” se busca apoyar el desarrollo de nuevos productos, procesos, aplicaciones, contenidos y servicios TIC que se pondrán al servicio de la ciudadanía, las empresas, la sociedad civil, las AA.PP., etc.
43 Plan Avanza (2006-2010) para el desarrollo de la Sociedad de la Información y de Convergencia con Europa y entre Comunidades y Ciudades Autónomas.
7.4. Marco estratégico autonómico
La Agenda Digital de Euskadi 2015 (AD@15), aprobada en julio de 2012, es la denominación del nuevo plan en materia de sociedad de la información. Este plan se orienta a alcanzar que la sociedad vasca dé un salto cualitativo convirtiéndose en referente poniendo las TIC al servicio del bienestar y de la mejora de la calidad de vida. Por ello, el Gobierno Vasco ha llevado a cabo un amplio proceso de consulta pública abierto a toda la población para su construcción.
Según comunicaciones del Gobierno Vasco, en su elaboración ha participado un centenar de personas, se han recogido más de 400 ideas que se han concretado en 101 iniciativas y proyectos contemplados en la agenda digital.
Según estas mismas fuentes, con la puesta en marcha de la Agenda Digital de Euskadi 2015, el Gobierno Vasco comienza la implementación de la estrategia que permitirá a la ciudadanía vasca, entre otras cosas, la posibilidad de:
Para ello, la Agenda Digital de Euskadi 2015 se estructura en torno a 4 grandes ámbitos (fuente: IREKIA):
Con anterioridad, el ejecutivo vasco ha articulado su acción a través del PESI 2010, el Plan Euskadi en la Sociedad de la Información cuyos soportes se alinean con los retos planteados en el Plan Avanza o la Agenda Digital Europea: la confianza y la seguridad digital; la interoperabilidad de las infraestructuras; y la integración y accesibilidad social para todas las personas y organizaciones. Para ello trabaja en tres ámbitos de actuación, por un lado la capacitación en e-competencias, por otro lado la oferta de servicios públicos y privados avanzados y, por último, la creación y desarrollo de infoestructuras de soporte (plataformas, seguridad, estándares, estructuras y dispositivos).
Visión del PESI 2010
Para conseguir su visión, el PESI plantea 5 metas, cuyo despliegue se materializa a través de la puesta en marcha de 5 iniciativas, que comprenden 18 programas de actuación, y que agrupan un amplio número de proyectos, a las que hay que añadir una sexta iniciativa “agendas digitales institucionales” y una séptima una séptima iniciativa, de implantación, seguimiento y evaluación referida al propio plan.
Esas 5 metas y las correspondientes iniciativas de aplicación al objeto del presente informe son:
Por último, la iniciativa Euskadi en la red que pretende mantener una presencia rica, dinámica y continua del Euskera y la cultura vasca en Internet y los medios digitales que, aunque implican principalmente a las administraciones con competencias en cultura y turismo, a las fundaciones y asociaciones y otras entidades relacionadas con la cultura, envuelve a la ciudadanía, especialmente en relación con el potencial que los servicios de la web 2.0 proporcionan para potenciar la marca “Euskadi en la red” entre toda la población.
Es necesario señalar, en el contexto del País Vasco, la importancia del acuerdo por el que se aprueba el “Calendario de planes y actuaciones significativas del Gobierno de la IX Legislatura 2009-2013” en relación con la incorporación de la apertura del Gobierno hacia la participación ciudadana como uno de los principios básicos (junto a la transparencia, el seguimiento y la evaluación) que deben incorporarse en el procedimiento para la elaboración, tramitación, aprobación, seguimiento y evaluación de los Planes y Actuaciones significativas. Para ello la Secretaria General de Coordinación del Gobierno Vasco elaboró el documento “Orientaciones para la elaboración de Planes de Gobierno por los Departamentos”.
8. Brecha digital de acceso
La brecha digital de acceso es el término acuñado para referirse a las desigualdades generadas en función del acceso a las TIC.
Es, junto a la brecha de uso, una de las aristas de la brecha digital más estudiada y documentada. Desde hace años, los diferentes gobiernos y organizaciones han realizado esfuerzos importantes por desarrollar modelos de estudio e indicadores estadísticos que permitan obtener datos fiables sobre el grado de acceso de la población a las TIC, permitiendo así su análisis comparativo con otros territorios, así como su estudio evolutivo a lo largo de los años.
Actualmente, es asumida como una de las brechas que se encuentran prácticamente superadas, ya que el despliegue de infraestructuras TIC, así como el equipamiento tecnológico de la población se han incrementado de forma significativa en los últimos años.
Caer en esta asunción (superación de brecha de acceso) es sencillo, debido a que actualmente el interés se centra sobre todo en las nuevas herramientas, en los nuevos usos de las TIC. En cambio, descuidar la brecha digital de acceso, o darla por superada, puede ser un error muy grave.
En un momento en el que prácticamente todos los gobiernos de los países desarrollados hablan de e-administración, gobierno abierto y e-participación, y de las múltiples virtudes de las TIC para el desarrollo de sus economías y sociedades, no debemos perder de vista algunos datos que, a modo de ejemplo, deben servir para llamar nuestra atención:
El 30% de los hogares europeos (con al menos una persona de entre 16 y 74 años) no disponen de conexión a Internet.44
En el caso de Euskadi, esta cifra asciende hasta el 34,2% (familias vascas con al menos una persona de entre 16 y 74 años que no disponen de conexión a Internet).
Este porcentaje aumenta hasta el 73,4% en Euskadi en el caso de las familias en las que vive al menos una persona con una edad comprendida entre 65 y 74 años.
El presente capítulo tiene como principal objetivo el dar respuesta a dos grandes preguntas: “¿quiénes son las personas que sufren principalmente la brecha digital de acceso?” y “¿cuáles son las barreras, o inhibidores que les impiden acceder a las TIC?”.
Para ello, comenzamos con un análisis breve de situación, a modo de imagen fija, sobre la disponibilidad de infraestructuras y equipamiento TIC en Euskadi.
44 Fuente: Digital Agenda Scoreboard http://ec.europa.eu/information_society/digital-agenda/scoreboard/graphs/index_en.htm. Consulta realizada en diciembre de 2011 para la media UE27.
8.1. Visión general de infraestructuras y equipamiento TCI en Euskadi
Uno de los pilares básicos para garantizar la democratización en el acceso a las TIC es el despliegue de infraestructuras tecnológicas.
(Tabla 6)
Telefonía fija
TELEFONÍA FIJA | ||
Nº total de líneas en servicio | Líneas/100 hab. | |
Araba/Álava | 152.193 | 48 |
Gipuzkoa | 345.988 | 48,9 |
Bizkaia | 564.897 | 49 |
España | 20.205.506 | 43 |
Fuente: CMT, Informe Provincias, diciembre 2011.
Los tres territorios históricos concentran una tasa de penetración de telefonía fija superior a la media estatal. Según los datos de la CMT, Euskadi cuenta con 1.063.078 líneas de telefonía fija en servicio, lo que representa el 5,26% del total de líneas en servicio de España.
(Tabla 7)
Telefonía móvil
TELEFONÍA FIJA | ||
Nº total de líneas móviles postpago | Líneas/100 hab. | |
Araba/Álava | 216.633 | 68,3 |
Gipuzkoa | 472.144 | 66,8 |
Bizkaia | 771.674 | 66,9 |
España | 31.460.633 | 66,9 |
Fuente: CMT, Informe Provincias, diciembre 2011.
En cuanto a la penetración de la telefonía móvil, los territorios históricos de Bizkaia y Gipuzkoa convergen plenamente con la media estatal en cuanto a número de líneas de telefonía móvil postpago por cada 100 habitantes.
Araba/Álava, con una tasa de penetración de 68,3 líneas por cada 100 habitantes se sitúa por encima de la media de Euskadi y la media estatal. Con 1.460.451 de líneas móviles, Euskadi concentra el 4,64% del total de líneas móviles postpago registradas en España.
La disponibilidad de teléfonos públicos en Euskadi asciende a 1.695 teléfonos públicos, lo que representa una tasa de penetración de prácticamente 1 teléfono público por cada 1.000 habitantes. La tasa registrada por los tres territorios históricos se encuentra, en esta ocasión, ligeramente por debajo de la media estatal.
(Tabla 8)
Teléfonos públicos
TELEFONÍA FIJA | ||
Nº total de líneas móviles postpago | Líneas/100 hab. | |
Araba/Álava | 273 | 0,8 |
Gipuzkoa | 580 | 0,9 |
Bizkaia | 842 | 0,7 |
España | 54.297 | 1,2 |
Fuente: CMT, Informe Provincias, diciembre 2011.
Euskadi también se sitúa por encima de la media estatal en materia de conectividad a Internet de alta velocidad. Con 526.424 líneas de banda ancha (5,03% del total de líneas de banda ancha de España), obtiene tasas de penetración (líneas de banda ancha por cada 100 habitantes) muy similares en los tres territorios históricos y superiores a la media española.
(Tabla 9)
Banda ancha en Euskadi
BANDA ANCHA | ||
Total de líneas BA | Líneas BA/100 hab. | |
Araba/Álava | 76.424 | 24,1 |
Gipuzkoa | 174.161 | 24,6 |
Bizkaia | 275.839 | 23,9 |
España | 10.464.790 | 22,3 |
Fuente: CMT, Informe Provincias, diciembre 2011.
La disponibilidad de infraestructuras de telecomunicaciones para ofrecer cobertura de Internet móvil en Euskadi se concreta en 2.187 estaciones base de telefonía móvil 2G (transmisión lenta de voz y datos) y 1.567 estaciones base de tecnología 3G (tecnología de tercera generación para transmisión de alta velocidad de datos y voz). Estas cifras significan que Euskadi aglutina el 4,11% de las estaciones base de tecnología 2G de España y el 4,59% de las estaciones de tecnología 3G.
(Tabla 10)
Estaciones base
ESTACIONES BASE | ||||
Nº de estaciones base de telefonía móvil 2G | %/total nacional | Nº de estaciones base de telefonía móvil 3G | %/total nacional | |
Araba/Álava | 396 | 0,7 | 257 | 0,7 |
Gipuzkoa | 636 | 1,2 | 433 | 1,3 |
Bizkaia | 1.155 | 2,2 | 886 | 2,6 |
España | 53.221 | 100 | 34.324 | 100 |
Fuente: CMT, Informe Provincias, diciembre 2011.
Tal y como se puede apreciar en los datos analizados, Euskadi cuenta con tasas de penetración de tecnologías básicas por encima de la media estatal. Esta realidad se ve acompañada por una importante infraestructura de conexión a Internet (tanto fija como móvil) que, a priori, garantiza la disponibilidad de acceso a la red en el territorio.
Ante estos datos, surge una pregunta que parece inevitable: ¿está realmente democratizado el acceso a Internet? ¿Se genera una brecha de acceso, desde el punto de vista de las infraestructuras, en el ámbito rural?
Para encontrar respuestas, acudimos a un indicador que nos permite un acercamiento a la respuesta a esta pregunta. El dato nos lo ofrece en esta ocasión el INE45, donde una de sus líneas de investigación en el ámbito de equipamiento TIC de los hogares es el de los “motivos por los que la población no dispone de Internet”.
La estadística nos dice que tan solo el 0,3% de las viviendas vascas que no disponen de conexión a Internet lo atribuyen al hecho de no disponer de cobertura en su zona. El dato es especialmente significativo, ya que la media estatal se sitúa en un 3%. Esto significa que, tal y como parece desvelar la encuesta TIC-Hogares del INE, Euskadi no adolece de un problema de disponibilidad de acceso a infraestructuras básicas de telecomunicaciones, como es la conexión a Internet, en función de la zona de residencia.
44 Fuente: Digital Agenda Scoreboard http://ec.europa.eu/information_society/digital-agenda/scoreboard/graphs/index_en.htm. Consulta realizada en diciembre de 2011 para la media UE27.
45 Fuente: INE, Encuesta sobre equipamiento y uso de las TIC en los hogares, 2011.
8.2. Equipamiento TIC. Una radiografía breve a la situación actual en Euskadi
En el empeño de analizar el acceso a las TIC en Euskadi desde una perspectiva integradora, el análisis anterior sobre las infraestructuras de telecomunicaciones en Euskadi es completado a continuación con una radiografía breve sobre el equipamiento TIC de las familias vascas. Para ello, nos apoyamos en los datos estadísticos de la Encuesta sobre Sociedad de la Información –ESI-Familias– proporcionada por el Instituto Vasco de Estadística (Eustat).
Las encuestas nos hablan de que, actualmente, el 72% de las familias vascas (con al menos 1 persona entre 16 y 74 años) dispone de ordenador en sus hogares, y un 65,8% disponen de conexión a Internet.
Por territorios históricos, Gipuzkoa se sitúa por encima de la media de la Comunidad Autónoma de Euskadi tanto en disponibilidad de ordenador como de Internet. Bizkaia converge prácticamente con la media de Euskadi, y Araba/Álava es el territorio que registra valores que se sitúan ligeramente por debajo de los otros dos territorios históricos.
(Ilustración 17)
Equipamiento de ordenador, Internet y teléfono móvil en familias de Euskadi (con al menos 1 persona entre 16 y 74 años) en 2011, por territorio (%)
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
En cuanto al tipo de tecnología elegida a la hora de conectarse a Internet, el 41% de las familias de Euskadi (con al menos una persona de entre 16 y 74 años) opta por la ADSL, mientras que el 20% contratan una conexión de cable (fibra óptica).
El teléfono móvil queda ratificado como una de las tecnologías con mayor presencia en las familias de Euskadi. Así, el 96,2% de las familias disponen de teléfono móvil. En este caso, Bizkaia se sitúa por delante de los otros dos territorios históricos, y un punto porcentual por encima de la media de Euskadi.
Abriendo el abanico de equipamientos TIC, la televisión (99,6%), la radio (89%) y el teléfono fijo (89,6%) son los otros equipamientos, además del teléfono móvil, con mayor presencia en las familias de Euskadi durante 2011.
(Ilustración 18)
Equipamiento TIC en las familias de Euskadi (con al menos 1 persona entre 16 y 74 años) en 2011, (%)
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
Los datos también confirman cómo, paulatinamente, los ordenadores portátiles (47,3%) ya tienen mayor presencia en las familias de Euskadi que los ordenadores de sobremesa o PCs (46,6%).
8.2.1. Evolución de equipamiento TIC en las familias. Una sociedad que madura digitalmente
Una perspectiva obligada en el análisis del equipamiento TIC de las familias de Euskadi es el estudio de la evolución de los principales indicadores en estos últimos años.
Estos datos nos permiten comprobar cómo ha ido incrementándose, año a año, el equipamiento de dispositivos y tecnologías básicas como el ordenador, Internet o el teléfono móvil.
La gráfica que se muestra a continuación dibuja un escenario bastante claro de cómo ha sido esta evolución. Aquellas tecnologías que están presentes en nuestras vidas desde hace más tiempo, como es el caso del ordenador y el teléfono móvil, han experimentado un crecimiento continuo pero moderado.
Así, si en 2006 en Euskadi el 59,4% de las familias (con al menos una persona entre 16 y 74 años) disponía de ordenador en su hogar; esta cifra ha crecido hasta el 72% registrado en 2011. Esto significa un crecimiento de 12,6 puntos porcentuales en los últimos 5 años.
En el caso del teléfono móvil, en el año 2006 este dispositivo ya estaba presente en el 90,9% de las familias (con al menos una persona entre 16 y 74 años). En los últimos años su presencia se ha visto incrementada en 5,3 puntos porcentuales, elevando el porcentaje de familias que disponen de teléfono móvil hasta el 96,2%.
(Ilustración 19)
Evolutivo de equipamiento TIC de las familias (con al menos 1 persona entre 16 y 74 años)
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
Pero sin lugar a duda, en el caso en el que más podemos apreciar cómo una tecnología ha ido ganando presencia en nuestros hogares, es en el de Internet. Mientras que en el año 2006 el 45,6% de las familias de Euskadi con al menos una persona entre 16 y 74 años disponía de conexión a Internet en sus hogares, en el año 2008 esta cifra ya había experimentado un crecimiento de 10 puntos porcentuales (55,9%). En 2011 el 65,8% de las familias ya disponen de conexión a Internet en sus hogares. Ello significa un crecimiento de 20,2 puntos porcentuales durante los últimos 5 años.
Algo similar ocurre con el tipo de tecnología utilizado para conectarse a Internet. Si en el año 2006 el 19,7% de las familias optaba por la ADSL y el 14% por la fibra óptica, en 2011 estos porcentajes se han visto incrementados significativamente. Así, en 2011 los porcentajes de familias (con al menos una persona de 16 a 74 años) que se conectan mediante estas tecnologías se sitúa en el 41% y el 20% respectivamente.
Nuestro enfoque, orientado hacia el análisis de las brechas digitales en Euskadi, nos obliga a hacer la doble lectura que ofrece este dato. Un tercio de las familias (34,2%) en Euskadi con al menos una persona entre 16 y 74 años no tienen acceso a Internet.
¿Qué es lo que se esconde detrás de esas “ausencias”? ¿Quiénes son esas personas que con frecuencia encerramos en un dato estadístico y denominamos infoexcluidos o personas en situación de exclusión digital?
A este respecto, la Agenda Digital Europea (máxima referencia como marco estratégico europeo en materia de desarrollo de la sociedad de la información) apunta:
“En muchos casos, esta situación se debe a falta de capacitación del usuario, por ejemplo alfabetización digital y mediática, no sólo para la empleabilidad, sino también para aprender, crear, participar y abordar con confianza y discernimiento el uso de los medios de comunicación digitales. La accesibilidad y la usabilidad constituyen también sendos problemas para los europeos con discapacidad. Salvar esta brecha digital puede ayudar a los miembros de los grupos sociales desfavorecidos a participar más en pie de igualdad en la sociedad digital (incluidos los servicios de interés directo para ellos, por ejemplo en los ámbitos del aprendizaje, la administración pública o la salud en línea) y a salir de su condición desfavorecida incrementando su empleabilidad. La competencia digital es, pues, una de las ocho competencias clave que resultan fundamentales para las personas en una sociedad basada en el conocimiento”.
De estas palabras se deduce con claridad la importancia del uso de las TIC, con especial atención a los colectivos, grupos sociales y minorías étnicas más desfavorecidas. Recuperando el espíritu de la Declaración Ministerial de Riga, en la que se apostaba fuertemente por las TIC como herramientas para el trabajo en pro de la justicia social.
Por otra parte, a medida que aumenta la masa crítica que se incorpora al uso de las TIC, y surgen nuevos servicios y oportunidades vinculados a su uso, aumenta el gap entre aquellas personas que incorporan las TIC a su día a día y aquellas otras que ni tan siquiera tienen acceso a ellas.
(Ilustración 20)
Evolutivo de equipamiento TIC de las familias
Fuente: Delivering Digital Inclusion. Action Plan, UK Government.
8.3. ¿Quiénes son esas personas que no tienen acceso a las TIC?
“No es moralmente aceptable, ni económicamente sostenible, dejar a millones de personas atrás, incapaces de usar las TIC o sus ventajas”.
Viviane Reding, EU Commissioner for Information Society and Media
(Noviembre 2007)46
Los datos de las encuestas de sociedad de la información-familias (ESIF) del Eustat y equipamiento y uso de las TIC (TIC-H) del INE nos permiten un análisis pormenorizado sobre el acceso a las TIC (equipamiento) en función de diferentes factores:
(Ilustración 21)
Factores para el análisis pormenorizado del acceso a TIC del Eustat
8.3.1. Edad y brecha de acceso
El análisis de equipamiento en función de la edad, tal y como se aprecia en la siguiente gráfica, nos ofrece tres grandes conclusiones:
(Ilustración 22)
Población de 15 y más años de la Comunidad Autónoma de Euskadi con ordenador en el hogar por edad, según territorio histórico (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
Las cifras parecen ser muy claras. Existe una clara relación entre la edad y el equipamiento TIC. Con la hipótesis de que la gente mayor es, quizá, la que cuenta con menores porcentajes de equipamiento TIC, consultamos a las estadísticas por aquellas familias en las que reside al menos una persona con edad comprendida entre los 65 y los 74 años.
Los resultados son, en esta ocasión, totalmente contundentes y esclarecedores.
El móvil se alza como la tecnología que es capaz de burlar la brecha de acceso entre la población de personas mayores. Así, el 84,5% de las familias en la que convive al menos una persona mayor declaran disponer de este dispositivo.
En cambio, el 70,7% de las familias con al menos una persona de entre 65 y 74 años no disponen de ordenador y el 73,4% no disponen de conexión a Internet.
(Ilustración 23)
Población de 15 y más años de la Comunidad Autónoma de Euskadi con Internet en el hogar por edad, según territorio histórico (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
(Ilustración 24)
Equipamiento TIC en familias con al menos 1 persona con edad comprendida entre los 65 y los 74 años por tamaño de hábitat y tipo de tecnología (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
8.3.2. Hábitat y brecha de acceso
Ahondando aún más en el análisis, y cruzando las variables de edad y tamaño de hábitat, los datos nos señalan que el tamaño del lugar de residencia tiene un impacto significativo en el equipamiento TIC de las familias en las que vive al menos una persona con edad comprendida entre los 65 y los 74 años.
El equipamiento TIC de las familias con personas mayores que residen en hábitats de menos de 10.000 habitantes es sensiblemente inferior al de aquellas otras familias que residen en grandes ciudades y hábitats con 100.000 o más habitantes, tal y como queda reflejado en la siguiente gráfica.
Como se puede apreciar, existe una diferencia de 5,7 puntos porcentuales entre la disponibilidad de ordenador en las familias con personas mayores a favor de aquellos hábitats de 100.000 o más habitantes.
La diferencia es aún más significativa en el caso de disponibilidad de conexión a Internet en el hogar. Mientras que el 22,5% de las familias con al menos una persona con edad comprendida entre los 65 y los 74 años disponen de Internet, aquellas otras familias con personas mayores que residen en entornos de 100.000 o más habitantes registran un porcentaje del 31%. Una diferencia de 8,5 puntos a favor de este último caso.
Aunque, tal vez, el caso más llamativo sea el de el equipamiento de teléfono móvil. Mientras que el 15,1% de las familias con al menos una persona con edad comprendida entre 65 y los 74 años que residen en hábitats de menos de 10.000 habitantes disponen de teléfono móvil, en el caso de las familias que reside en ciudades de 100.000 o más habitantes, este porcentaje se incrementa hasta el 46,6%.
(Ilustración 25)
Equipamiento TIC en familias con al menos 1 persona con edad comprendida entre los 65 y los 74 años por tamaño de hábitat y tipo de tecnología (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
Al ampliar los márgenes de la franja de edad de análisis, y centrándonos en este caso en las familias en las que reside al menos una persona con edad comprendida entre los 16 y los 74 años, podemos comprobar que siguen existiendo diferencias de equipamiento TIC en función del tamaño del hábitat.
Las mayores diferencias se aprecian en la disponibilidad de Internet y teléfono móvil. Así, mientras que el 67% de las familias con al menos una persona de entre 16 y 74 años y que residen en hábitats de 100.000 o más habitantes dispone de Internet en sus hogares, en el caso de aquellas familias que residen en hábitats de menos de 10.000 habitantes, este porcentaje se reduce al 64% (3 puntos porcentuales de diferencia). Respecto al equipamiento de teléfono móvil, de nuevo se constata una diferencia de casi 2 puntos porcentuales a favor de aquellas familias que residen en grandes ciudades con 100.000 o más habitantes.
(Ilustración 26)
Equipamiento TIC en familias con al menos 1 persona con edad comprendida entre los 16 y los 74 años por tamaño de hábitat y tipo de tecnología (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
8.3.3. Género y brecha de acceso
Otra de las variables de estudio es la de acotar las diferencias de acceso a las TIC desde la perspectiva de género. Los datos del Eustatnos confirman que, en la actualidad, continúan existiendo diferencias de acceso entre hombres y mujeres.
Así, tal y como se puede apreciar en la siguiente gráfica, mientras que el 74,5% de los hombres disponen de al menos un ordenador en sus hogares, esta cifra se ve reducida al 68,1% en el caso de las mujeres. Casi 6,5 puntos porcentuales que representan un gap significativo y que, al hacer el análisis por territorios históricos, llega a ser aún superior en el caso de Bizkaia. Aquí, la diferencia de disponibilidad de ordenador entre hombres y mujeres alcanza los 7,8 puntos porcentuales.
(Ilustración 27)
Población de 15 y más años de la Comunidad Autónoma de Euskadi con ordenador en el hogar por sexo, según territorio histórico (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
Por el contrario, Araba/Álava se sitúa en cabeza en el ranking de los territorios históricos de Euskadi donde más pequeña es la brecha de acceso a una tecnología básica como el ordenador (70,3% registrado por los hombres, frente al 68,4% de las mujeres).
Estas diferencias se vuelven a hacer notorias en el caso de acceso a Internet.
Mientras que el 62,6% de las mujeres disponen de conexión a Internet en sus hogares, el porcentaje de hombres con disponibilidad de conexión a Internet asciende hasta el 69%, una diferencia de 6,4 puntos porcentuales.
En el caso de Gipuzkoa, la diferencia entre el porcentaje de hombres y mujeres que disponen de conexión a Internet en sus hogares se sitúa en 6,6 puntos porcentuales, rozando la convergencia con la media de Euskadi.
Al igual que sucedía en el caso de equipamiento de ordenador, Bizkaia vuelve a ser el territorio histórico donde mayor es la brecha de acceso entre hombre y mujer respecto a la disponibilidad de conexión a Internet (una diferencia de 7,8 puntos porcentuales). Igualmente, Araba/Álava se sitúa de nuevo en cabeza en el ranking de los territorios históricos en cuanto a reducción de brecha de acceso entre hombres y mujeres. Así, tan solo existe una diferencia de 1,3 puntos entre los porcentajes registrados por hombres y mujeres.
(Ilustración 28)
Población de 15 y más años de la Comunidad Autónoma de Euskadi con ordenador en el hogar por sexo, según territorio histórico (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
8.3.4. Tipo de familia y brecha de acceso
Las encuestas del Eustat nos apuntan a una posible brecha de acceso relacionada con el tipo de familia. Los datos más claros los encontramos en el análisis de los indicadores de equipamiento más básicos (ordenador e Internet).
Parece existir una clara relación entre el tamaño de la familia y la disponibilidad o no de equipamiento TIC. Así, mientras que el 71,4% de las familias (con al menos 1 entre 16 y 74 años) que dispone de ordenador se trata de una familia con hijos y/o hijas, este porcentaje disminuye hasta el 15,4% para el caso de familias compuestas por personas con pareja, y hasta el 13,1% perteneciente a familias formadas por personas aisladas.
Algo similar sucede respecto al equipamiento de conexión a Internet. El 73% de las familias (con al menos 1 entre 16 y 74 años) que disponen de conexión a Internet en sus hogares son familias con hijos y/o hijas. El 14,8% se corresponde con personas con pareja, y el 12,2% a personas aisladas.
(Ilustración 29)
Equipamiento de ordenador en familias con al menos 1 miembro entre 16 y 74 años (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
Este análisis nos redirige de nuevo hacia las personas mayores, ya que representan un porcentaje elevado de las personas que viven solas. Según datos del Imserso (Proyecto Piloto “Cerca de ti”, el 20% de las personas mayores de España (mayores de 65 años) viven solas, una proporción mayor que en cualquier otra franja de edad, y que asciende hasta el 31,6% de las personas mayores con edades comprendidas entre los 85 y los 89 años. Según esta misma fuente, la soledad es una realidad extremadamente feminizada en la población mayor, ya que prácticamente el 77% de las personas mayores que viven solas son mujeres.
(Ilustración 30)
Disponibilidad de conexión a Internet en familias con al menos 1 miembro entre 16 y 74 años (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
Así pues, detrás de estos porcentajes de familias compuestas por personas que viven solas, podría producirse una correlación entre varios de los factores que hasta ahora hemos analizado como generadores de brecha digital: tipo de familia, edad y género.
8.3.5. Nivel de estudios, relación con la actividad y brecha de acceso
Se trata de dos de los factores tradicionales en la generación de diferencias de acceso y uso de las TIC. Las cifras nos apuntan a que el perfil de las personas que disponen de ordenador y conexión a Internet en sus hogares está compuesto por personas con estudios secundarios o superiores finalizados, y que están estudiando o trabajando actualmente. Por el contrario, aquellas personas con niveles de estudios más bajos o que se encuentran en situación de paro o inactividad, registran porcentajes de equipamiento TIC en sus hogares mucho más bajos.
En la siguientes gráficas se muestra el gap existente en función del nivel de estudios, y de la relación con la actividad, produciéndose diferencias de hasta 55 puntos porcentuales en el equipamiento de ordenador entre la población de 15 y más años de la Comunidad Autónoma de Euskadi según el nivel de estudios y de 50 puntos entre las personas que estudian y aquellas otras que están en paro o inactividad.
(Ilustración 31)
Equipamiento ordenador en el hogar en población de 15 y más años de Euskadi por nivel de estudios (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
(Ilustración 32)
Equipamiento ordenador en el hogar en población de 15 y más años de Euskadi por relación con la actividad (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
En el caso de la disponibilidad de conexión a Internet en los hogares en función del nivel de estudios y de la relación con la actividad, se vuelve a repetir la tónica observada en el caso de disponibilidad de ordenador. Personas con niveles básicos de formación y/o en situación de paro o inactividad, son los perfiles que registran unos porcentajes de equipamiento más bajo en función del análisis de estos factores.
(Ilustración 33)
Disonibilidad de conexión a Internet en el hogar en población de 15 y más años de Euskadi por nivel de estudios (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
(Ilustración 34)
Disonibilidad de conexión a Internet en el hogar en población de 15 y más años de Euskadi por relación con la actividad (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
8.3.6. Ingresos mensuales y brecha de acceso
La relación entre las desigualdades sociales y las digitales tienen mayoritariamente numerosos nexos, entre ellos, la convergencia de factores que las generan. Uno de ellos es, sin duda, el poder adquisitivo en cuanto al nivel de ingresos que es capaz de ingresar un hogar.
Según los datos procedentes de la encuesta de hogares y TIC del INE, el 97% de las viviendas (con al menos 1 miembro de 16 a 74 años) con ingresos de más de 2.700 euros al mes disponen de ordenador en sus hogares. Esta cifra contrasta claramente con el 42,5% registrado por aquellas familias cuyos ingresos mensuales con inferiores a 1.100 euros al mes.
(Ilustración 35)
Viviendas (con al menos 1 miembro de 16 a 74 años) en Euskadi con algún tipo de ordenador por ingresos mensuales netos del hogar (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del INE.
(Ilustración 36)
Viviendas (con al menos 1 miembro de 16 a 74 años) en Euskadi con conexión a Internet por ingresos mensuales netos del hogar (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del INE.
La situación se repite en el caso de disponibilidad de conexión a Internet. Así, mientras que el 88,6% de las viviendas que ingresan entre 1.801 y 2.700 euros al mes cuentan con conexión a Internet, este porcentaje se ve rebajado hasta el 33,7% para el caso de aquellas viviendas cuyos ingresos mensuales se sitúan por debajo de los 1.100 euros.
Las cifras nos desvelan la existencia de otro grupo de personas que registran diferencias importantes de acceso a las herramientas TIC más básicas: aquellas con menos ingresos netos mensuales. Este gap se minimiza en el caso de otras herramientas TIC como es el caso del teléfono móvil, en el que las diferencias de disponibilidad más significativas se encuentran por debajo de los 10 puntos porcentuales. La universalización de su acceso, como ya hemos comentado en algún otro apartado de este mismo capítulo, ha logrado evadir la brecha de acceso en la población de Euskadi. Su transformación continua en pequeños ordenadores de bolsillo, su posibilidad de conectarse a redes inalámbricas gratuitas y su conexión con el ocio se esconde también detrás de la menor dependencia de la disponibilidad del ordenador o una conexión a Internet fija en el móvil.
8.3.7. Diversidad funcional y personas inmigrantes
Si bien no disponemos de datos cuantitativos48 que nos permitan tener información detallada sobre los porcentajes de disponibilidad de equipamiento básico en los hogares o centros de residencia de estos colectivos, las personas con diversidad funcional y personas inmigrantes han sido identificados por el grupo de personas expertas consultado en la elaboración del presente informe, tanto a través deentrevistas como de mesas de trabajo, como colectivos que actualmente experimentan brechas digitales, entre ellas, la brecha digital de acceso.
Los tres colectivos citados experimentan esta brecha por causas diferentes, tal y como analizaremos en el próximo apartado de este mismo capítulo y son, a su vez, colectivos prioritarios de cara a facilitar su acceso a las TIC, debido a las posibilidades que estas pueden brindarles de cara a la mejora de su calidad de vida y promoción social.
Estos colectivos, ausentes frecuentemente en las grandes encuestas sobre equipamiento TIC a nivel nacional, europeo e internacional, así como en los indicadores de progreso de los principales documentos estratégicos en materia de desarrollo de la sociedad de la información, canalizan con frecuencia su acceso a las TIC a través del tejido asociativo y entidades no gubernamentales que trabajan día a día junto a esta ciudadanía.
46 Fuente: Commission calls for an all-inclusive digital society: http://europa.eu/rapid/press-release_IP-07-1804_en.htm.
47 Encuesta de Equipamiento y Uso de las TIC en los Hogares, TIC-H 2011, INE.
48 Nota: actualmente existen datos relacionados con TIC y diversidad funcional, así como TIC y personas inmigrantes, pero hacen referencia a la brecha de uso y no de acceso.
8.4. Barreras e inhibidores de acceso a las TIC
8.4.1. Motivos para la no disponibilidad de acceso a Internet en el hogar
Para comprender la existencia de una brecha digital de acceso, es necesario analizar no solo los porcentajes de disponibilidad de herramientas TIC, sino también las barreras o inhibidores de acceso que generan dicha brecha.
Uno de los indicadores que se analizan habitualmente, es el de la exposición de motivos sobre la no disponibilidad de conexión a Internet en el hogar. En este caso, la encuesta sobre sociedad de la información del Eustat analiza esta realidad en base a 5 variables:
Los datos generados a partir de las declaraciones de las familias de Euskadi (con al menos 1 miembro de edad comprendida entre los 16 y los 74 años), priorizan estas variables en el siguiente orden:
(Ilustración 37)
Motivos para la no disponibilidad de acceso a Internet en el hogar
Esto significa que, aún hoy, existe un porcentaje importante de la ciudadanía que declaran como principales motivos para no acceder a una herramienta TIC básica como es Internet, el hecho de sentir “no la quiero, no la necesito”, así como “no tengo conocimientos” necesarios. Dos motivos que podrían estar asociados a otras variables aliadas como la percepción de “fragilidad” de las TIC (o el miedo a romper algo) o la falta de “familiaridad” con dispositivos de pantalla diferentes al tradicional televisor. Algo a lo que hay que añadir la característica de “multifuncionalidad” que cada vez atesoran más todos los dispositivos que terminan en nuestras manos. Esta variable afecta principalmente a determinados colectivos con menos habilidades y conocimientos TIC, quienes habitualmente se sienten más cómodos con dispositivos de una única función.
Respecto a la variable de falta de conocimientos, las TIC tienen un componente que agudizan esta barrera de acceso. Se trata del amplio abanico de habilidades que, a menudo de forma inconsciente, debemos ser capaces de dominar para interactuar con los dispositivos actuales. Aunque una persona sea capaz de manejar un teclado, un ratón, o una pantalla táctil, ha de ser capaz de establecer conexiones entre diversos canales (voz, sonido, texto…), interpretar símbolos muy específicos, así como manejar herramientas que frecuentemente se actualizan y modifican su aspecto y disposición de botones. El conocimiento acumulado que hoy nos permite utilizar unas tecnologías, dentro de un tiempo necesitará ser actualizado y enriquecido. Esta necesidad, muy aliada con la motivación, no encuentra la misma respuesta en todas las personas que pretenden acceder a las TIC, ocasionando conductas de rechazo o indiferencia.
8.4.2. Evolutivo de motivos para la no disponibilidad de acceso a Internet
¿Ha sido esto siempre así? Echando la vista atrás, y comparando los datos registrados por esta misma pregunta sobre los motivos para no disponer de conexión a Internet en el hogar en los últimos años, descubrimos que:
(Ilustración 38)
Familias en Euskadi con al menos 1 miembro con edad comprendida entre 16 y 74 años por motivos para no disponer de acceso a Internet en el hogar (%). Evolutivo 2006-2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
8.4.3. Motivos para la no disponibilidad de acceso a Internet y las personas mayores
En el caso de las familias en las que vive al menos 1 persona con edad comprendida entre los 65 y los 74 años, los principales motivos para no disponer de acceso a Internet vuelven a ser los mismos:
(Ilustración 39)
Comparativa principales motivos de no disponibilidad de acceso a Internet en el hogar entre familias de Euskadi con al menos 1 miembro de edad comprendida entre los 16 y los 74 años, y familias con al menos 1 miembro de edad comprendida entre los 65 y los 74 años (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
El tercer principal motivo para el no acceso a Internet en sus hogares es la falta del equipamiento necesario para poder disponer de Internet (8,1% de las familias con al menos 1 miembro con edad comprendida entre 65 y 74 años). Este porcentaje supera en casi 5 puntos porcentuales al registrado por las familias con al menos 1 miembro con edad comprendida entre los 16 y los 74 años.
La falta de motivación ante las TIC entre el colectivo de personas mayores, tal y como se explica en el estudio Los mayores ante las TIC de Fundación Vodafone (2011), es una de las variables más determinante: “al no existir un impulso motivacional, no hay reconocimiento de necesidad, ni deseo de uso. Las personas mayores que carecen de motivación, dicen: ‘Las tecnologías no están en mí’”.
Tras esta postura de rechazo se intuye una gran distancia y desconocimiento de las TIC, así como de las posibilidades que les pueden ofrecer. Se podría apuntar entonces que, tras una variable actitudinal (rechazo, falta de motivación, indiferencia) se esconde realmente una posible brecha de aprendizaje que el propio colectivo reconoce, eligiendo este motivo como la segunda principal causa de no disponer de conexión a Internet en sus hogares.
8.4.4. Evolutivo de motivos para la no disponibilidad de acceso a Internet y las personas mayores
Desde una perspectiva de evolución de estos indicadores en los últimos años, nos encontramos con que empiezan a notarse los efectos de las actuaciones puestas en marcha desde diferentes entidades y organizaciones (públicas y privadas) para acercar las TIC a las personas mayores. Si bien en 2006 los motivos de “no lo quiero, no lo necesito” y “no tengo conocimientos” eran también las principales barreras declaradas por las personas mayores de cara al acceso a Internet (disponibilidad de conexión en sus hogares), estos alcanzaban porcentajes del 82,8 y el 33,1% respectivamente. Cifras alejadas del 69,8 y el 26,1% actuales (respectivamente) y que ofrecen una doble lectura:
Como ocurre en el caso de las familias con al menos una persona de edad comprendida entre los 16 y los 74 años, la consideración de los servicios como demasiado caros también ha evolucionado a lo largo de estos últimos 5 años. Así, si en 2006 el 7,9% de las familias con al menos 1 miembro con edad comprendida entre los 65 y los 74 años declaraba no tener Internet en su hogar por ser demasiado caro, este porcentaje ha bajado hasta el 1,4% registrado actualmente.
8.4.5. Percepción de las barreras e inhibidores de acceso a las TIC desde la óptica de las personas que usan las TIC
La elaboración de la encuesta sobre apropiación de las TIC y e-participación realizada por el Ararteko en el marco del presente informe extraordinario nos permite poder analizar los factores que actúan como barreras o inhibidores de acceso a las TIC desde la perspectiva de aquellas personas que sí acceden a ellas y las usan.
Para ello, se incorporó al cuestionario la siguiente pregunta: “¿Cuáles son las barreras que, en su opinión, impiden a algunas personas y colectivos sociales, poder utilizar las tecnologías de la información y la comunicación? (Respuesta espontánea)”.
Esta información nos permite establecer un contraste entre las barreras percibidas por las personas que no acceden a las TIC (analizadas anteriormente a través de los datos de la encuesta ESIF del Eustat), y aquellas barreras que las personas que sí acceden y las usan creen que están impidiendo a determinados colectivos, grupos sociales y/o minorías étnicas no acceder a ellas.
El dato más significativo lo encontramos en la barrera económica o de falta de recursos económicos para acceder a las TIC. El análisis de datos del Eustat nos confirmaba que las personas que no usan las TIC sitúan las cuestiones relacionadas con el precio excesivo de las tecnologías como último factor en el ranking de barreras de acceso. En cambio, el 52,6% de las personas encuestadas que acceden a las TIC y son usuarios frecuentes de estas, creen que el precio es el principal motivo que ejerce como inhibidor o barrera de acceso.
Los siguientes factores por orden en el ranking de barreras serían la “falta de información/no saber utilizarlas” (16,8%) y la “desconfianza o desconocimiento sobre sus beneficios y utilidad” (15%). El 11,4% de la población encuestada apuntan hacia “la edad” como factor inhibidor, y un 9% optan por señalar la “falta de interés”.
(Ilustración 40)
Barreras que en su opinión impiden a determinados colectivos y grupos sociales acceder a las TIC (%), 2012
Elaboración propia a partir de la encuesta sobre apropiación de las TIC y e-participación en Euskadi (Ararteko, 2012).
Resulta destacable que un 5,6% de las personas encuestadas declara que actualmente no existen barreras que impidan el acceso a las TIC a determinados colectivos, grupos sociales y/o minorías étnicas. Un factor que supera en porcentaje a otros como “la falta de cobertura” (2,9%), “tener una discapacidad” (2,3%) o la “falta de tiempo” (1,7%).
8.4.6. Otras barreras e inhibidores de acceso a las TIC
Además de las variables que ejercen de barreras o inhibidores de acceso a las TIC que se desprenden de los datos de la encuesta ESIF del Eustat, la participación de expertos y expertas a través de las mesas de trabajo y entrevistas nos apunta a otras posibles barreras o inhibidores de acceso que deben ser tenidas en cuenta de cara al planteamiento de recomendaciones para el impulso de la e-inclusión.
La siguiente tabla muestra una colección de posibles barreras e inhibidores con su descripción, y el cruce con aquellos colectivos a los que más afectan:
(Tabla 11)
Otras barreras e inhibidores de acceso a las TIC
Barrera o inhibidor de acceso a las TIC | Descripción | Colectivos a los que más afecta |
Brechas sociales | La exclusión social, con sus diversos factores generadores de exclusión, se encuentran en el origen de la existencia de barreras de acceso a las TIC. La falta de recursos económicos para poder permitirse la compra de dispositivos o contratación de servicios, así como las carencias en otros factores vinculados directamente con el bienestar social, provocan que las TIC ocupen un papel secundario (personas en situación irregular, personas sin hogar, personas en situación de pobreza, minorías étnicas…). | Personas inmigrantes, personas en situación irregular, personas sin hogar, personas en situación de pobreza, minorías étnicas, personas en prisión, personas en situación de riesgo de exclusión social. |
Falta de apoyo | Para muchos colectivos que no están accediendo a las TIC, se detecta una posible falta de apoyos. Especialmente en aquellos casos en los que las personas no están participando en algún movimiento asociativo o no son beneficiarios de acciones de protección social (públicas o privadas). Se identifica la necesidad de generar apoyos más proactivos que lleguen a la persona excluida digitalmente, y no que se queden a la espera de su llegada. | Personas inmigrantes, personas en situación irregular, personas mayores, personas sin hogar, personas en situación de pobreza, minorías étnicas, personas en prisión, personas en situación de riesgo de exclusión social. |
Problemas de accesibilidad | La confluencia de realidades como la existencia de interfaces totalmente inadaptadas para personas mayores o personas con discapacidad, webs que no cumplen con los estándares de accesibilidad, la falta de instrucciones claras y redactadas en un lenguaje comprensible y en múltiples idiomas, etc., provocan que muchas personas no puedan acceder a unas tecnologías que no se adaptan a sus necesidades. Esta barrera se agudiza especialmente en el caso de personas que no participan en asociaciones que les acompañen en la obtención de subvenciones para la adaptación de dispositivos, identificación en el mercado de dispositivos adaptados, formación para el uso de estos dispositivos, etc. | Personas inmigrantes, personas mayores, personas con discapacidad (especialmente personas con discapacidad intelectual). |
Problemas de usabilidad | Esta barrera tiene que ver con la percepción por parte de muchas personas de que las herramientas tecnológicas son complicadas, no tienen un funcionamiento lógico e intuitivo, y provocan estados de frustración que finalmente generan actitudes de rechazo o indiferencia hacia estas herramientas. Un mercado cada vez más orientado a la obsolescencia programada de los dispositivos y a la multifuncionalidad de los mismos que, con frecuencia, priorizan otros aspectos a la facilidad y claridad en la interacción con estos. | Personas mayores, personas con discapacidad. |
Estrategias de marketing | La existencia de campañas de marketing de servicios y herramientas TIC dirigidas a un segmento de la población con un nivel medio/avanzado en el uso de las TIC en el que priman criterios como “dispositivos caros, de grandes prestaciones, y que constantemente se actualizan a versiones con mayores capacidades”, genera cierta distorsión entre ciertos colectivos que perciben que ese mercado (y por tanto esas herramientas, servicios…) no tienen nada que ver con ellos. | Personas mayores. |
Limitaciones funcionales | Limitaciones en las aptitudes físicas o mentales del sujeto que puede provocar dificultades en el proceso de aprendizaje y en el uso de las herramientas. Esta barrera correlaciona directamente con las barreras de accesibilidad y usabilidad ligadas al diseño de los dispositivos y herramientas TIC. | Personas mayores, personas con discapacidad. |
Experiencias frustrantes | La vivencia de experiencias frustrantes con ciertas herramientas o servicios TIC, pueden generar cierta actitud de rechazo hacia estas. Esta barrera está ligada directamente con la motivación, y es aliada de otras como la falta de conocimientos y la falta de apoyos. | Personas inmigrantes, personas en situación irregular, personas sin hogar, personas mayores, personas en situación de pobreza, minorías étnicas, personas en prisión, personas en situación de riesgo de exclusión social. |
Gasto de consumo | Frecuentemente se piensa en el elevado coste de algunos dispositivos como un inhibidor de acceso a las TIC, pero es preciso considerar no solo el coste de acceso (compra), sino el de su mantenimiento. Algunas personas, por ejemplo, podrían asumir la contratación de un acceso a Internet en sus hogares, pero no el pago de las cuotas mensuales del servicio. | Personas inmigrantes, personas en situación irregular, personas sin hogar, personas mayores, personas en situación de pobreza, minorías étnicas, personas en situación de riesgo de exclusión social. |
Falta de contenidos y/o servicios | Algunos colectivos y grupos de personas perciben que no existen contenidos y/o servicios que les puedan ofrecer las TIC que conecten con sus necesidades o intereses. En algunos casos se trata de una percepción contrastada en alguna experiencia previa, y otras veces, se trata de percepciones ancladas en el desconocimiento de estos. En ambos casos, esta barrera correlaciona con otras como la falta de motivación y la falta de conocimiento, pudiendo desencadenar en una actitud de indiferencia hacia las TIC. | Personas inmigrantes, personas en situación irregular, personas sin hogar, personas mayores, personas en situación de pobreza, minorías étnicas, personas en situación de riesgo de exclusión social. |