8.3. ¿Quiénes son esas personas que no tienen acceso a las TIC?
“No es moralmente aceptable, ni económicamente sostenible, dejar a millones de personas atrás, incapaces de usar las TIC o sus ventajas”.
Viviane Reding, EU Commissioner for Information Society and Media
(Noviembre 2007)46
Los datos de las encuestas de sociedad de la información-familias (ESIF) del Eustat y equipamiento y uso de las TIC (TIC-H) del INE nos permiten un análisis pormenorizado sobre el acceso a las TIC (equipamiento) en función de diferentes factores:
(Ilustración 21)
Factores para el análisis pormenorizado del acceso a TIC del Eustat
8.3.1. Edad y brecha de acceso
El análisis de equipamiento en función de la edad, tal y como se aprecia en la siguiente gráfica, nos ofrece tres grandes conclusiones:
(Ilustración 22)
Población de 15 y más años de la Comunidad Autónoma de Euskadi con ordenador en el hogar por edad, según territorio histórico (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
Las cifras parecen ser muy claras. Existe una clara relación entre la edad y el equipamiento TIC. Con la hipótesis de que la gente mayor es, quizá, la que cuenta con menores porcentajes de equipamiento TIC, consultamos a las estadísticas por aquellas familias en las que reside al menos una persona con edad comprendida entre los 65 y los 74 años.
Los resultados son, en esta ocasión, totalmente contundentes y esclarecedores.
El móvil se alza como la tecnología que es capaz de burlar la brecha de acceso entre la población de personas mayores. Así, el 84,5% de las familias en la que convive al menos una persona mayor declaran disponer de este dispositivo.
En cambio, el 70,7% de las familias con al menos una persona de entre 65 y 74 años no disponen de ordenador y el 73,4% no disponen de conexión a Internet.
(Ilustración 23)
Población de 15 y más años de la Comunidad Autónoma de Euskadi con Internet en el hogar por edad, según territorio histórico (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
(Ilustración 24)
Equipamiento TIC en familias con al menos 1 persona con edad comprendida entre los 65 y los 74 años por tamaño de hábitat y tipo de tecnología (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
8.3.2. Hábitat y brecha de acceso
Ahondando aún más en el análisis, y cruzando las variables de edad y tamaño de hábitat, los datos nos señalan que el tamaño del lugar de residencia tiene un impacto significativo en el equipamiento TIC de las familias en las que vive al menos una persona con edad comprendida entre los 65 y los 74 años.
El equipamiento TIC de las familias con personas mayores que residen en hábitats de menos de 10.000 habitantes es sensiblemente inferior al de aquellas otras familias que residen en grandes ciudades y hábitats con 100.000 o más habitantes, tal y como queda reflejado en la siguiente gráfica.
Como se puede apreciar, existe una diferencia de 5,7 puntos porcentuales entre la disponibilidad de ordenador en las familias con personas mayores a favor de aquellos hábitats de 100.000 o más habitantes.
La diferencia es aún más significativa en el caso de disponibilidad de conexión a Internet en el hogar. Mientras que el 22,5% de las familias con al menos una persona con edad comprendida entre los 65 y los 74 años disponen de Internet, aquellas otras familias con personas mayores que residen en entornos de 100.000 o más habitantes registran un porcentaje del 31%. Una diferencia de 8,5 puntos a favor de este último caso.
Aunque, tal vez, el caso más llamativo sea el de el equipamiento de teléfono móvil. Mientras que el 15,1% de las familias con al menos una persona con edad comprendida entre 65 y los 74 años que residen en hábitats de menos de 10.000 habitantes disponen de teléfono móvil, en el caso de las familias que reside en ciudades de 100.000 o más habitantes, este porcentaje se incrementa hasta el 46,6%.
(Ilustración 25)
Equipamiento TIC en familias con al menos 1 persona con edad comprendida entre los 65 y los 74 años por tamaño de hábitat y tipo de tecnología (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
Al ampliar los márgenes de la franja de edad de análisis, y centrándonos en este caso en las familias en las que reside al menos una persona con edad comprendida entre los 16 y los 74 años, podemos comprobar que siguen existiendo diferencias de equipamiento TIC en función del tamaño del hábitat.
Las mayores diferencias se aprecian en la disponibilidad de Internet y teléfono móvil. Así, mientras que el 67% de las familias con al menos una persona de entre 16 y 74 años y que residen en hábitats de 100.000 o más habitantes dispone de Internet en sus hogares, en el caso de aquellas familias que residen en hábitats de menos de 10.000 habitantes, este porcentaje se reduce al 64% (3 puntos porcentuales de diferencia). Respecto al equipamiento de teléfono móvil, de nuevo se constata una diferencia de casi 2 puntos porcentuales a favor de aquellas familias que residen en grandes ciudades con 100.000 o más habitantes.
(Ilustración 26)
Equipamiento TIC en familias con al menos 1 persona con edad comprendida entre los 16 y los 74 años por tamaño de hábitat y tipo de tecnología (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
8.3.3. Género y brecha de acceso
Otra de las variables de estudio es la de acotar las diferencias de acceso a las TIC desde la perspectiva de género. Los datos del Eustatnos confirman que, en la actualidad, continúan existiendo diferencias de acceso entre hombres y mujeres.
Así, tal y como se puede apreciar en la siguiente gráfica, mientras que el 74,5% de los hombres disponen de al menos un ordenador en sus hogares, esta cifra se ve reducida al 68,1% en el caso de las mujeres. Casi 6,5 puntos porcentuales que representan un gap significativo y que, al hacer el análisis por territorios históricos, llega a ser aún superior en el caso de Bizkaia. Aquí, la diferencia de disponibilidad de ordenador entre hombres y mujeres alcanza los 7,8 puntos porcentuales.
(Ilustración 27)
Población de 15 y más años de la Comunidad Autónoma de Euskadi con ordenador en el hogar por sexo, según territorio histórico (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
Por el contrario, Araba/Álava se sitúa en cabeza en el ranking de los territorios históricos de Euskadi donde más pequeña es la brecha de acceso a una tecnología básica como el ordenador (70,3% registrado por los hombres, frente al 68,4% de las mujeres).
Estas diferencias se vuelven a hacer notorias en el caso de acceso a Internet.
Mientras que el 62,6% de las mujeres disponen de conexión a Internet en sus hogares, el porcentaje de hombres con disponibilidad de conexión a Internet asciende hasta el 69%, una diferencia de 6,4 puntos porcentuales.
En el caso de Gipuzkoa, la diferencia entre el porcentaje de hombres y mujeres que disponen de conexión a Internet en sus hogares se sitúa en 6,6 puntos porcentuales, rozando la convergencia con la media de Euskadi.
Al igual que sucedía en el caso de equipamiento de ordenador, Bizkaia vuelve a ser el territorio histórico donde mayor es la brecha de acceso entre hombre y mujer respecto a la disponibilidad de conexión a Internet (una diferencia de 7,8 puntos porcentuales). Igualmente, Araba/Álava se sitúa de nuevo en cabeza en el ranking de los territorios históricos en cuanto a reducción de brecha de acceso entre hombres y mujeres. Así, tan solo existe una diferencia de 1,3 puntos entre los porcentajes registrados por hombres y mujeres.
(Ilustración 28)
Población de 15 y más años de la Comunidad Autónoma de Euskadi con ordenador en el hogar por sexo, según territorio histórico (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
8.3.4. Tipo de familia y brecha de acceso
Las encuestas del Eustat nos apuntan a una posible brecha de acceso relacionada con el tipo de familia. Los datos más claros los encontramos en el análisis de los indicadores de equipamiento más básicos (ordenador e Internet).
Parece existir una clara relación entre el tamaño de la familia y la disponibilidad o no de equipamiento TIC. Así, mientras que el 71,4% de las familias (con al menos 1 entre 16 y 74 años) que dispone de ordenador se trata de una familia con hijos y/o hijas, este porcentaje disminuye hasta el 15,4% para el caso de familias compuestas por personas con pareja, y hasta el 13,1% perteneciente a familias formadas por personas aisladas.
Algo similar sucede respecto al equipamiento de conexión a Internet. El 73% de las familias (con al menos 1 entre 16 y 74 años) que disponen de conexión a Internet en sus hogares son familias con hijos y/o hijas. El 14,8% se corresponde con personas con pareja, y el 12,2% a personas aisladas.
(Ilustración 29)
Equipamiento de ordenador en familias con al menos 1 miembro entre 16 y 74 años (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
Este análisis nos redirige de nuevo hacia las personas mayores, ya que representan un porcentaje elevado de las personas que viven solas. Según datos del Imserso (Proyecto Piloto “Cerca de ti”, el 20% de las personas mayores de España (mayores de 65 años) viven solas, una proporción mayor que en cualquier otra franja de edad, y que asciende hasta el 31,6% de las personas mayores con edades comprendidas entre los 85 y los 89 años. Según esta misma fuente, la soledad es una realidad extremadamente feminizada en la población mayor, ya que prácticamente el 77% de las personas mayores que viven solas son mujeres.
(Ilustración 30)
Disponibilidad de conexión a Internet en familias con al menos 1 miembro entre 16 y 74 años (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
Así pues, detrás de estos porcentajes de familias compuestas por personas que viven solas, podría producirse una correlación entre varios de los factores que hasta ahora hemos analizado como generadores de brecha digital: tipo de familia, edad y género.
8.3.5. Nivel de estudios, relación con la actividad y brecha de acceso
Se trata de dos de los factores tradicionales en la generación de diferencias de acceso y uso de las TIC. Las cifras nos apuntan a que el perfil de las personas que disponen de ordenador y conexión a Internet en sus hogares está compuesto por personas con estudios secundarios o superiores finalizados, y que están estudiando o trabajando actualmente. Por el contrario, aquellas personas con niveles de estudios más bajos o que se encuentran en situación de paro o inactividad, registran porcentajes de equipamiento TIC en sus hogares mucho más bajos.
En la siguientes gráficas se muestra el gap existente en función del nivel de estudios, y de la relación con la actividad, produciéndose diferencias de hasta 55 puntos porcentuales en el equipamiento de ordenador entre la población de 15 y más años de la Comunidad Autónoma de Euskadi según el nivel de estudios y de 50 puntos entre las personas que estudian y aquellas otras que están en paro o inactividad.
(Ilustración 31)
Equipamiento ordenador en el hogar en población de 15 y más años de Euskadi por nivel de estudios (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
(Ilustración 32)
Equipamiento ordenador en el hogar en población de 15 y más años de Euskadi por relación con la actividad (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
En el caso de la disponibilidad de conexión a Internet en los hogares en función del nivel de estudios y de la relación con la actividad, se vuelve a repetir la tónica observada en el caso de disponibilidad de ordenador. Personas con niveles básicos de formación y/o en situación de paro o inactividad, son los perfiles que registran unos porcentajes de equipamiento más bajo en función del análisis de estos factores.
(Ilustración 33)
Disonibilidad de conexión a Internet en el hogar en población de 15 y más años de Euskadi por nivel de estudios (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
(Ilustración 34)
Disonibilidad de conexión a Internet en el hogar en población de 15 y más años de Euskadi por relación con la actividad (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del Eustat.
8.3.6. Ingresos mensuales y brecha de acceso
La relación entre las desigualdades sociales y las digitales tienen mayoritariamente numerosos nexos, entre ellos, la convergencia de factores que las generan. Uno de ellos es, sin duda, el poder adquisitivo en cuanto al nivel de ingresos que es capaz de ingresar un hogar.
Según los datos procedentes de la encuesta de hogares y TIC del INE, el 97% de las viviendas (con al menos 1 miembro de 16 a 74 años) con ingresos de más de 2.700 euros al mes disponen de ordenador en sus hogares. Esta cifra contrasta claramente con el 42,5% registrado por aquellas familias cuyos ingresos mensuales con inferiores a 1.100 euros al mes.
(Ilustración 35)
Viviendas (con al menos 1 miembro de 16 a 74 años) en Euskadi con algún tipo de ordenador por ingresos mensuales netos del hogar (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del INE.
(Ilustración 36)
Viviendas (con al menos 1 miembro de 16 a 74 años) en Euskadi con conexión a Internet por ingresos mensuales netos del hogar (%), 2011
Elaboración propia a partir de datos del INE.
La situación se repite en el caso de disponibilidad de conexión a Internet. Así, mientras que el 88,6% de las viviendas que ingresan entre 1.801 y 2.700 euros al mes cuentan con conexión a Internet, este porcentaje se ve rebajado hasta el 33,7% para el caso de aquellas viviendas cuyos ingresos mensuales se sitúan por debajo de los 1.100 euros.
Las cifras nos desvelan la existencia de otro grupo de personas que registran diferencias importantes de acceso a las herramientas TIC más básicas: aquellas con menos ingresos netos mensuales. Este gap se minimiza en el caso de otras herramientas TIC como es el caso del teléfono móvil, en el que las diferencias de disponibilidad más significativas se encuentran por debajo de los 10 puntos porcentuales. La universalización de su acceso, como ya hemos comentado en algún otro apartado de este mismo capítulo, ha logrado evadir la brecha de acceso en la población de Euskadi. Su transformación continua en pequeños ordenadores de bolsillo, su posibilidad de conectarse a redes inalámbricas gratuitas y su conexión con el ocio se esconde también detrás de la menor dependencia de la disponibilidad del ordenador o una conexión a Internet fija en el móvil.
8.3.7. Diversidad funcional y personas inmigrantes
Si bien no disponemos de datos cuantitativos48 que nos permitan tener información detallada sobre los porcentajes de disponibilidad de equipamiento básico en los hogares o centros de residencia de estos colectivos, las personas con diversidad funcional y personas inmigrantes han sido identificados por el grupo de personas expertas consultado en la elaboración del presente informe, tanto a través deentrevistas como de mesas de trabajo, como colectivos que actualmente experimentan brechas digitales, entre ellas, la brecha digital de acceso.
Los tres colectivos citados experimentan esta brecha por causas diferentes, tal y como analizaremos en el próximo apartado de este mismo capítulo y son, a su vez, colectivos prioritarios de cara a facilitar su acceso a las TIC, debido a las posibilidades que estas pueden brindarles de cara a la mejora de su calidad de vida y promoción social.
Estos colectivos, ausentes frecuentemente en las grandes encuestas sobre equipamiento TIC a nivel nacional, europeo e internacional, así como en los indicadores de progreso de los principales documentos estratégicos en materia de desarrollo de la sociedad de la información, canalizan con frecuencia su acceso a las TIC a través del tejido asociativo y entidades no gubernamentales que trabajan día a día junto a esta ciudadanía.
46 Fuente: Commission calls for an all-inclusive digital society: http://europa.eu/rapid/press-release_IP-07-1804_en.htm.
47 Encuesta de Equipamiento y Uso de las TIC en los Hogares, TIC-H 2011, INE.
48 Nota: actualmente existen datos relacionados con TIC y diversidad funcional, así como TIC y personas inmigrantes, pero hacen referencia a la brecha de uso y no de acceso.