4. Becas de investigación
Se ha publicado, dentro de la C
olección de Derechos Humanos “Juan San Martín”, el siguiente trabajo de investigación: Aplicación de los derechos de las personas usuarias y c
onsumidoras en la C
omunidad Autónoma del País Vasco. Farapi: Ana Beatriz Rodríguez Ruano, Oihane García Santiago, Amaia Benito Pumarejo, Araitz Rodríguez Gutiérrez, Nerea Elías Muxika, Begoña Pecharromán Ferrer:
Este trabajo se inscribe dentro del proyecto de investigación de igual nombre impulsado por el Ararteko, a través de una beca c
onvocada en noviembre de 2010. La c
onvocatoria buscaba impulsar el análisis de una determinada problemática en el ámbito c
oncreto de la C
omunidad Autónoma Vasca, dirigido a analizar a fondo la aplicación de algunos derechos de las personas usuarias y c
onsumidoras, entendiendo que se trata de problemas que afectan a la mayor parte de la población, y que la vulneración de esos derechos incide de forma más intensa en determinados c
olectivos más desprotegidos. (ver c
ap II.8. apartado III de este informe)
Destacamos, por su interés, algunas de sus conclusiones:
consumo ha venido siendo el eje vertebrador del sistema socioeconómico, y ha tenido un peso importante en la identidad de la
ciudadanía. Pero la concienciación y el
conocimiento de los derechos
como personas
consumidoras siguen siendo algo precarios. Si bien, en los últimos años ha experimentado
cierta revitalización, motivada en parte al
contexto de
crisis mundial, que ha puesto en marcha mecanismos de reivindicación de los derechos
conquistados.
consumo, pero esto no evita que se sigan dando vulneraciones a los derechos de las personas
consumidoras. En algunos
casos,
como el transporte aéreo, de forma sistemática. En ocasiones, el pago de las sanciones les sale más rentable a las empresas que hacer
cambios efectivos en su forma de actuar.
citan
cuando se informa sobre los derechos
como
consumidores,
como si el proceso fuera algo mecánico donde no se dan desencuentros, y
conflictos,
como si no produjera reacciones emocionales. Existen, por el
contrario, algunas sensaciones que pueden ser empleadas de forma positiva, para motivar a la
continuidad de los procesos.
consumidoras es
clave. El proceso y la resolución de la reclamación
cambian sustancialmente
cuando entran en acción, y las propias empresas son
conscientes de ello, articulando vías específicas para estas entidades. No obstante, las entidades acusan una falta de apoyo por parte de las Administraciones, y una escasa
concienciación por parte de la
ciudadanía, especialmente en los
casos de las entidades privadas, que adolecen de un escaso nivel de asociacionismo, lo que limita su
capacidad de influencia.
Como
conclusión y propuesta final tras el análisis realizado, se propugna la necesidad de intervenir sobre los factores identificados en el proyecto, para modificar la
cultura de
consumo, y que
cada persona,
como
consumidora y usuaria individual, pero también
como parte de un
conjunto más amplio, sea
consciente de que sus decisiones en la reclamación de sus derechos le afectan no sólo a ella, sino a la totalidad de la población. Es importante además que todos los agentes participantes, incluida las empresas, se sientan
cómplices en ese proceso, lo que es un reto difícil, pero alcanzable.