Introducción - visión global del informe
1. Un informe síntesis
Este informe quiere ser una síntesis de otros muchos informes y seguimientos. Una síntesis, prácticamente, de todos los informes extraordinarios del A
rarteko publicados hasta la fecha sobre la infancia, o con a
partados específicos dedicados a
ella, y de los seguimientos efectuados sobre cada uno de ellos a
ño tras a
ño.
Ello explica los temas, situaciones o problemáticas que a
quí se a
bordan –temas que estructuran el capítulo tres, cuerpo central del informe–, y también el modo de a
bordarlos, destacando a
lgunas informaciones que nos parecen claves y eludiendo o remitiéndonos a
otras ya publicadas con a
nterioridad, sin necesidad de repetirlas. En este sentido, si bien la edición escrita en ocasiones se remite a
referencias que exigen cierta búsqueda, la edición en CD lo facilita en muchos casos mediante los oportunos links.
Así, como se puede comprobar en el propio índice, los temas a
bordados con cierta entidad han sido objeto de una serie de informes monográficos a
nteriores, o bien de un seguimiento especial del A
rarteko:
1) Protección de menores en riesgo o desamparo:
Objeto del informe extraordinario Atención a
la infancia y a
dolescencia en situación de desprotección en el que se efectuaron 42 recomendaciones, y de seguimientos a
nuales desde el a
ño 1999 hasta el a
ño 2009, con especial incidencia en ciertos servicios (centros u hogares de a
cogida; puntos de encuentro; programas de a
ctuaciones en el á
mbito local…).
2) Menores extranjeros no a
compañados:
Objeto del informe extraordinario Situación de los menores extranjeros no a
compañados en la CAPV, en el que efectuamos 36 recomendaciones, y de seguimientos a
nuales tanto a
ntes de su publicación (desde el a
ño 1998) como después de ella, con especial incidencia en la situación de los centros de a
cogida, procesos de tutela y documentación, programas de emancipación…
3) Adolescentes infractores:
Objeto del informe extraordinario Intervención con menores infractores, en el que efectuamos 46 recomendaciones, y de seguimientos a
nuales desde el a
ño 1999, con especial a
tención en las medidas judiciales y su cumplimiento en centros de internamiento.
4) Necesidades educativas especiales as
ociadas a
a
lguna discapacidad:
Objeto del informe extraordinario La respuesta a
las necesidades educativas especiales en la CAPV, en el que se efectuaron 21 recomendaciones, y de seguimientos a
nuales desde el a
ño 2002, con especial a
tención en el tema de las barreras a
rquitectónicas y la a
ccesibilidad, a
bordado también en otro informe extraordinario del A
rarteko (Accesibilidad en edificios de uso público de la Comunidad A
utónoma del País Vasco, 2003).
5) Necesidades educativas de la población socialmente desfavorecida:
Objeto de estudio en el informe extraordinario sobre necesidades educativas especiales, a
nteriormente citado, en el que se efectuaron recomendaciones específicas sobre este sector, y de seguimientos a
nuales desde el a
ño 2002.
6) Necesidades educativas específicas de la población gitana:
Objeto de seguimiento desde el a
ño 2003, como a
mpliación del seguimiento del informe sobre necesidades educativas especiales.
7) Menores de familias temporeras:
Objeto del informe extraordinario Situación de la población temporera en Á
lava, en el que efectuamos 3 recomendaciones específicas sobre la escolarización y a
tención de este sector de la población, as
í como de seguimiento a
ntes de la publicación del informe (desde el a
ño 1995) y con posterioridad a
su publicación (desde el a
ño 2003).
8) Necesidades educativas específicas de la población inmigrante:
Objeto de seguimiento sistemático desde el a
ño 2003, como a
mpliación del seguimiento del informe sobre necesidades educativas especiales.
9) Salud mental de la población infanto juvenil:
Objeto del informe sobre Atención comunitaria de la enfermedad mental, en el que, entre las 18 recomendaciones generales, se efectuó una específica en materia de infancia, y de seguimientos a
nuales, especialmente respecto a
los centros de día terapéutico-educativos. Tema a
bordado también reiteradamente a
l a
nalizar o efectuar seguimientos sobre determinados sectores de la población en situaciones de especial vulnerabilidad (desprotección, infractores, menores extranjeros no a
compañados…).
10) Adolescentes con consumos problemáticos de drogas:
Objeto del informe recién publicado sobre El papel de las instituciones vascas respecto a
los consumos de drogas de la a
dolescencia, en el que efectuamos 23 recomendaciones.
11) Menores víctimas de a
coso escolar:
Objeto del informe sobre Convivencia y conflictos en los centros educativos, en el que efectuamos 28 recomendaciones, motivo de seguimiento sistemático desde el a
ño 2007 y de varios foros de participación ciudadana.
12) Menores de orientación homosexual (lesbianas y gays) o bisexual, o con identidad de género transexual o transgénero:
Objeto del Foro de reflexión y participación ciudadana sobre la situación de los a
dolescentes y jóvenes lesbianas, gays, transexuales y bisexuales, celebrado en 2008. As
imismo, se a
bordó la cuestión en el Informe sobre transmisión de valores a
menores.
13) Otras situaciones o sectores de especial vulnerabilidad:
Abordamos a
hí, a
unque sea con menor profundidad, situaciones sobre las que se han llevado a
cabo otras a
ctuaciones de oficio o de queja, si bien no se han plasmado hasta la fecha en un informe extraordinario específico. En concreto:
– Las situaciones de pobreza que a
fectan a
menores.
– Las situaciones de a
buso sexual.
– Menores víctimas de diferentes formas de violencia.
– El tratamiento de la imagen de los menores en los medios de comunicación.
– La utilización de las nuevas tecnologías de la información y comunicación.
Así, de un modo sintético, se vuelven a
tratar a
quí la casi totalidad de los temas estudiados en los informes extraordinarios del A
rarteko sobre la infancia, salvo el informe sobre La transmisión de valores a
menores, publicado en 2009 y que exigiría un tratamiento especial.
2. Con sus riesgos y limitaciones
– En ocasiones, cuando hemos estudiado en profundidad una situación de especial vulnerabilidad, el trabajo del A
rarteko ha consistido en recabar y hacer visibles informaciones y datos que a
penas se conocían (sirvan como ejemplo el informe sobre temporeros o el informe sobre menores extranjeros no a
compañados, realidades que hasta ese momento permanecían semiocultas).
En este caso, sin embargo, la situación es, en cierto modo, la contraria: el volumen de información disponible es tal, que el principal riesgo del informe consiste precisamente en perderse en el bosque de los datos sin fijarse o destacar a
quellos á
rboles−problemas que consideramos fundamentales, a
l menos desde nuestra perspectiva.
Hemos preferido, por ello, sacrificar en este caso la extensión, la profundidad, la exhaustividad propia de informes monográficos a
nteriores, en a
ras de una mayor claridad y concisión, e incluso, tal vez, un mayor valor divulgativo.
– A
lgo parecido podemos señalar respecto a
las fuentes utilizadas.
Básicamente, nos hemos limitado a
las fuentes disponibles en la propia institución: estudios e informes del propio A
rarteko, expedientes de oficio, peticiones de información y seguimiento, expedientes de queja, visitas a
centros y recursos, reuniones con responsables de los servicios, entrevistas y grupos de discusión con menores, reuniones con as
ociaciones y a
gentes sociales, talleres de trabajo con otras defensorías…
Lógicamente, hemos tenido en cuenta también otros informes, estudios o fuentes de datos, especialmente a
quellos trabajos publicados por las a
dministraciones responsables (planes, memorias, evaluaciones…) o en los que el á
mbito de estudio ha sido la CAPV o a
lguno de sus territorios, pero más como elementos de contraste o complementarios de nuestros propios datos, que como fuentes primarias.
De a
hí que en el capítulo 6, sobre Fuentes de información, sólo hayamos incluido a
quellas fuentes escritas realmente utilizadas, citadas o que hemos considerado de especial interés.
3. Con una estructura muy definida
Una estructura que, por una parte, queda reflejada en el índice de capítulos y subcapítulos, y por otra, en los a
partados o bloques de información considerados en cada uno de los "temas" o sectores de población del capítulo 3. As
í:
1) Como se puede ver, en el índice de capítulos del informe, tras esta introducción se ofrece:
– Un primer capítulo dedicado a
la caracterización de la infancia y, dentro de ella, a
lo que en este informe hemos venido a
llamar como "infancias vulnerables" o situaciones de especial vulnerabilidad.
– Un segundo capítulo –voluntariamente corto– dedicado a
presentar, a
unque sea de modo elemental, el marco jurídico y competencial en el que se desarrolla la a
tención a
la infancia.
– Un tercer capítulo –con mucho, el más a
mplio–, que, como ya hemos dicho, constituye el cuerpo central del informe y en el que se da entidad propia a
cada una de las 13 situaciones o sectores señalados más a
rriba.
– Un cuarto capítulo, en el que se intenta efectuar un diagnóstico o valoración más global, destacando a
lgunos problemas "comunes", que se repiten y condicionan la a
tención a
todos o a
muchos de los sectores a
nalizados.
– El capítulo 5 de recomendaciones del A
rarteko, sobre el que haremos a
lguna observación más a
delante.
– El último capítulo (cap. 6: Fuentes de información) debe considerarse como complementario a
la parte sustantiva del informe.
2) Y en lo que respecta a
la estructura interna de cada uno de los 13 a
partados o temas a
bordados en el capítulo 3, ésta, con ligeras variantes, sigue en casi todos los casos el siguiente esquema básico:
– Caracterización del sector. (Primera a
proximación a
l tema o sector que se a
borda)
– Los a
ntecedentes. (Pasos o a
ctuaciones a
nteriores)
– Los problemas fundamentales. (Desde la perspectiva del A
rarteko)
– Las propuestas de mejora. (Recomendaciones ya efectuadas)
– Los seguimientos del A
rarteko.
– Datos esenciales - indicadores.
– Luces y sombras en la respuesta institucional.
– La visión de las quejas. (Tendencias, a
lgún ejemplo significativo)
– La visión de los propios menores.
– Evolución. Elementos más destacables (a modo de síntesis o conclusión).
– Nuevas recomendaciones.
No todos los epígrafes se utilizan en todos los casos. En ocasiones se unifican varios o se salta uno de ellos, pero el esquema básico se mantiene y sirve para estructurar la información. En dos de los subcapítulos (Infractores y, sobre todo, Menores extranjeros no a
compañados, por sus especiales características) se ha dedicado un a
partado específico a
resumir el marco normativo.
4. Y con un número de recomendaciones limitado
Como se ha señalado a
l inicio, partíamos de un volumen de recomendaciones ya efectuadas en informes a
nteriores enormemente a
mplio: 42 en el informe sobre protección; 36 en el informe sobre menores extranjeros no a
compañados; 46 en el de a
dolescentes infractores; etc. En total, 200 recomendaciones en materia de infancia y sobre los sectores o problemáticas a
quí a
nalizadas, y eso, contando solamente las efectuadas en los correspondientes informes extraordinarios; no otras recomendaciones generales.
Algunas de esas recomendaciones, como es natural, se han ido cumpliendo con el tiempo, por lo que no es necesario mantenerlas. Otras muchas, sin embargo, siguen sin ser a
plicadas o –lo que es más frecuente– lo han sido parcialmente, por lo cual pueden seguir manteniendo su vigencia, plena o parcial.
En cualquier caso, se trata de recomendaciones ya efectuadas con a
nterioridad y, por tanto, conocidas por los a
gentes sociales y responsables públicos, sin necesidad de repetirlas a
quí. Solamente cuando la situación que se quería mejorar con una o varias de nuestras recomendaciones, a
nuestro juicio, no sólo no ha mejorado sino que ha empeorado, o la hace a
hora a
ún más necesaria que entonces, la hemos reformulado a
quí o hemos insistido sobre ella.
Por lo demás, hemos procurado que las recomendaciones efectuadas en este informe sean "nuevas", a
daptadas a
las situaciones más recientes, no demasiadas, centradas en a
quellos problemas que consideramos más determinantes, y, muchas o a
lgunas de ellas, de carácter transversal (es decir, a
plicables a
todas o muchas de las situaciones o sectores estudiados).
Esto último queda reflejado en cierto modo en el propio esquema utilizado para ordenarlas. As
í, las ocho primeras recomendaciones son presentadas bajo el título de "Recomendaciones de carácter global, válidas para todos o muchos de los sectores a
nalizados":
– Reforzar y extender la conciencia social sobre los derechos de la infancia.
– Poner en práctica el derecho a
participar, a
ser oído.
– A
poyar a
las familias para el correcto desarrollo de sus funciones respecto a
sus miembros menores de edad.
– Clarificar mejor las responsabilidades institucionales y el papel del Tercer sector en la a
tención a
la infancia.
– Liderazgo institucional en la creación y defensa de los recursos necesarios.
– Evaluación sistemática y pública de los resultados obtenidos.
– Mejorar la coordinación entre diferentes servicios y profesionales como medio eficaz para garantizar una mayor coherencia en las intervenciones con menores.
– Compaginar políticas compensatorias con medidas contra la segregación o estigmatización.
A partir de ese momento, las recomendaciones tienen un carácter más específico y, en ciertos casos, suponen la concreción y a
plicación de recomendaciones a
nteriores a
un determinado á
mbito o sistema. As
í, efectuamos:
– Doce recomendaciones en relación a
los sistemas de protección, encaminadas a
mejorar la a
tención que se ofrece en nuestra Comunidad a
los/las menores en situaciones de riesgo o desamparo, tanto a
utóctonos como extranjeros (menores extranjeros no a
compañados).
– Siete recomendaciones en relación con el sistema de justicia juvenil (Recomendaciones 21 a
27).
– Diecisiete recomendaciones sobre el sistema educativo, relativas a
la respuesta a
las necesidades educativas especiales y específicas (Recomendaciones 28 a
35), a
la mejora de la convivencia escolar (Recomendaciones 36 a
41) y a
la protección y garantía de sus derechos de los menores de orientación homosexual o de identidad transexual (42 a
44).
– Cinco recomendaciones para la mejora de la a
tención a
la infancia por parte del sistema sanitario (Recomendaciones 45 a
49).
– Nuestras propuestas de mejora terminan con una recomendación final sobre la necesidad de seguimiento de las diferentes situaciones de vulnerabilidad y su evolución.