PRESENTACIÓN
La atención a las personas menores de edad ha sido y sigue siendo una prioridad constante entre las líneas de actuación del Ararteko.
Los niños, las niñas, las personas adolescentes, por sus propias características, constituyen un sector de la población especialmente vulnerable. Todas las personas menores de edad y por el simple hecho de serlo. Sin embargo, dentro del conjunto de las personas menores de edad hay, a su vez, grupos o sectores en situaciones de especial riesgo respecto a sus derechos.
Durante estos años, la institución del Ararteko ha venido dedicando una atención prioritaria a estos sectores de niños, niñas y adolescentes en situaciones desfavorecidas o con necesidades especiales: menores en riesgo o desamparo, acogidos por los sistemas de protección; menores extranjeros no acompañados; adolescentes infractores; alumnado con necesidades educativas especiales o específicas, ligadas a discapacidad, a situación socioeconómica, a origen o etnia…; menores de orientación homosexual o de identidad transexual; menores con problemas de salud mental; adolescentes con consumos problemáticos de drogas; menores objeto de acoso escolar…
Todas esas problemáticas han sido objeto de estudios monográficos, de recomendaciones específicas, de foros de reflexión y participación ciudadana, de seguimientos anuales… y a cada una de ellas se les dedica un apartado específico en este informe.
También hemos podido llevar a cabo actuaciones respecto a otras situaciones de especial vulnerabilidad, aunque no con un carácter tan sistemático. Por ejemplo, respecto al maltrato a la infancia en situaciones de violencia de género, sobre los riesgos derivados del uso o abuso de las nuevas tecnologías, o sobre el tratamiento de los menores en los medios de comunicación... También estas problemáticas son abordadas en este informe, aunque con menor extensión.
Así pues, el informe que aquí se presenta trata de analizar de manera sintética determinadas situaciones que afectan de manera especial a la infancia, haciéndola más vulnerable en cuanto a sus derechos y su correcto desarrollo.
La diferencia fundamental respecto a los informes extraordinarios anteriores es que en éste pretendemos ofrecer una visión más sintética, menos exhaustiva de cada sector; una visión evolutiva. Queremos también analizar las relaciones que se dan entre las diferentes situaciones, los problemas que pueden ser comunes a muchas de ellas y, en consecuencia, ofrecer propuestas o nuevas recomendaciones que puedan servir para mejorar la situación de estas infancias vulnerables y, en última instancia, garantizar de modo más eficaz el cumplimiento real de sus derechos.
Ello exige mejoras específicas en los diferentes sistemas implicados en la atención a la infancia y adolescencia:
– en los sistemas de protección;
– en el sistema de justicia
juvenil;
– en el sistema educativo;
– en el sistema de salud…
Y a cada uno de ellos dirigimos recomendaciones específicas.
Pero exige también una mayor colaboración o coordinación entre los diferentes sistemas: para mejorar, por ejemplo, la prevención, para mejorar la detección y atajar en sus inicios las situaciones de riesgo, para hacer más coherentes las diferentes intervenciones… En este sentido son muchos los departamentos y las administraciones directamente concernidas: la Administración local, la Administración territorial, la Administración autonómica, la Administración central…
Pero, junto a las implicaciones de las diferentes administraciones o instituciones, conviene recordar que la defensa de los derechos de la infancia corresponde al conjunto de la sociedad, a todos sus componentes, lo que exige un mayor conocimiento y sensibilización sobre las situaciones de especial vulnerabilidad. También a ello pretende contribuir este informe.
Quiero formular tres consideraciones finales:
– El informe que aquí se presenta ha sido elaborado íntegramente con recursos propios del Ararteko. En concreto, por el personal del Ararteko integrado en la Oficina de Atención a la Infancia y la Adolescencia, cuya creación, todavía reciente, es una muestra más de la prioridad que la institución del Ararteko ha dado y quiere seguir dando a este sector especialmente vulnerable de la población.
– El informe ofrece una determinada visión de la infancia, una visión sobre determinadas situaciones concretas en las que viven un número variable de chicos y chicas de nuestra Comunidad. No es, pues, un informe global o diagnóstico sobre el conjunto de la infancia, sino un informe centrado en situaciones de especial vulnerabilidad. Más concretamente todavía, sobre determinadas situaciones de especial vulnerabilidad: aquellas en las que el Ararteko ha podido centrar su intervención. Pero esto no quiere decir que en otras situaciones no analizadas en este informe no existan también conculcaciones de derechos de personas menores de 18 años o aspectos necesitados de mejora.
– El enfoque y esquema utilizado en este informe sigue –y en cierto modo, culmina– una línea de trabajo iniciada y mantenida por la institución del Ararteko durante muchos años (al menos, desde el año 1995). Una línea de trabajo que ha ido dando sus frutos, y podrá aún seguir dando más resultados, pero que, sin duda, deberá ser completada con otras líneas de actuación y de investigación a desarrollar en los próximos años desde la Oficina de Atención a la Infancia y Adolescencia de esta institución.
Para finalizar, quiero mostrar un agradecimiento profundo y muy especial a Fermín Barceló, una persona que ha sido un pilar fundamental en la institución del Ararteko, quien se jubiló en agosto del año pasado. Fermín asumió, desde su incorporación al Ararteko en abril de 1995, la responsabilidad del Área de Menores así como sobre otros cometidos de una gran importancia y relevancia para la institución. Eran de tal magnitud la valía, la capacidad de trabajo y la implicación con sus responsabilidades de Fermín que el Área del Menor adquirió, por su volumen de actividades, una entidad muy grande, y ello motivó la conversión del Área en la Oficina de la Infancia y la Adolescencia en octubre de 2009, que Fermín dirigió con maestría e ilusión de neoadolescente hasta su jubilación.
Este informe monográfico es hijo de Fermín Barceló. Suya fue la idea de su elaboración, y suya ha sido la mayor parte del arduo trabajo que ha supuesto su elaboración y redacción. Pese a que son varias las personas del Ararteko que han participado en su confección, justo es reconocer el ímprobo y excelente trabajo que ha realizado en el mismo Fermín Barceló, que ha seguido trabajando en él después de haber causado baja en la institución hasta culminar el cierre del informe. Quiero, por tanto, mostrarle mi enorme gratitud por su incansable y encomiable trabajo durante todos estos años de jornadas inacabables en el Ararteko, y en particular por habernos dejado a la hora de su marcha este extraordinario informe, que recoge, a modo de broche de oro, el fruto de la dedicación e implicación de Fermín para con los niños, niñas y adolescentes más vulnerables y por tanto más necesitados de políticas y actuaciones públicas eficaces y garantistas.
Iñigo Lamarca Iturbe
ARARTEKO
Febrero de 2011